Por el padre Michael McAndrew, CSsR
GREENWOOD – El 20 de enero, unas setenta y cinco personas asistieron a la segunda Peregrinación por la Vida en el Santuario de María, Madre del Delta, para celebrar la vida desde la concepción hasta la muerte.
La peregrinación celebra la valoración de la “prenda perfecta” de la vida; un término acuñado por el cardenal Joseph Bernardin en una conferencia de 1983, afirmando que los obispos deben considerar como cuestiones provida no solo el aborto, pero tambien la inmigración, la atención a los ancianos, la pena de muerte, la proliferación nuclear y otros asuntos que amenazan el respeto de vida humana.
El día incluyó una caminata de tres millas, con cinco paradas para reflexionar sobre los valores de la vida que incluían el derecho a la vida como un niño; la dignidad y el respeto de las personas de todas las culturas, idiomas y razas; lo sagrado de nuestro medio ambiente; respeto por los ancianos y aquellos que sufren enfermedades; y celebrando la juventud.
Bailarines aztecas de Jackson dirigieron la ruta. Después de la caminata, testimonios fueron brindados por una persona quien sobrevivió cáncer tres veces, un médico, un capellán de la prisión, un ministro de la juventud y un niño (un ciudadano de los EE. UU.) cuyo padre se encuentra en medio de un proceso de deportación. Todos estos testimonios exigen celebrar la vida, la dignidad humana y la fe.
Los participantes viajaron desde Jackson, Greenwood, Greenville, Cleveland, Vardaman, Memphis, Batesville y otros lugares. El obispo Kopacz cerró este día de celebración y oración con el santo sacrificio de la misa.
(El padre redentorista, Michael McAndrew, vive en Greenwood como parte de la comunidad de sacerdotes que sirven a los hispanos en el Delta)
Fotos por Hermana María Elena Méndez, MGSpS