Por David Agren
CIUDAD DE MÉXICO (CNS) – Las Hermanas de la Misericordia celebraron la liberación de seis personas en contra de la minería en Honduras, quienes pasaron casi dos años y medio en detención, en un caso que la Corte Suprema del país dijo que nunca hubiera avanzado.
“Celebramos la liberación de los (defensores del Rio Guapinol) que fueron encarcelados injustamente y juzgados por proteger a sus comunidades de la minería destructiva”, tuitearon las Hermanas de la Misericordia el 11 de febrero, dos días después de la decisión de la Corte Suprema.
“La gente de todo el mundo los apoyó porque proteger el agua no es un crimen. Merecen reparaciones”.
Seis hombres, parte de un grupo conocido como defensores del Rio Guapinol, fueron condenados el 9 de febrero por los cargos de causar daños criminales y la detención ilegal del jefe de seguridad de la empresa minera, según el diario The Guardian. Dos de los acusados fueron declarados no culpables.
Apenas un día después, la Corte Suprema de Justicia de Honduras revocó las condenas y anuló el juicio de los ocho defensores, declarando que el juez anterior no tenía jurisdicción sobre el caso.
Los cargos contra los defensores, junto con la prolongada detención y las breves condenas, generaron condena internacional y expusieron los estrechos vínculos entre las élites políticas, económicas y judiciales del país centroamericano.
Honduras ha tenido mala fama en los últimos años por los asesinatos y la persecución de los defensores del medioambiente, quienes a menudo se oponen a la construcción de represas o minas cerca de sus comunidades sin su consulta.
“(Los defensores) simbolizan la solidaridad de los pueblos en defensa de la vida y la libertad. Ellos fortalecen nuestra esperanza y dan sentido a nuestras luchas”, tuiteó el padre jesuita Ismael Moreno Coto, fundador de Radio Progreso en Honduras.
Los medioambientalistas se habían opuesto a la construcción de una mina de óxido de hierro en un parque nacional, lo que contaminó el río y la fuente de agua de su comunidad. La mina es propiedad de un individuo poderoso con conexiones políticas, Lenir Pérez, según los investigadores, quienes cuestionaron las supuestas irregularidades en el proceso de aprobación y la falta de consultas comunitarias.
“(Son) las élites económicas trabajando con las élites políticas”, dijo en una entrevista Jean Stokan, coordinadora de justicia de las Hermanas de la Misericordia de las Américas.
Las Hermanas de la Misericordia, quienes han tenido presencia en Honduras durante 60 años, abogaron por la comunidad de Guapinol antes de la detención y juicio de los medioambientalistas.
Las hermanas llevaron el caso a la Embajada de EE.UU. en Honduras, donde Stokan recordó que le dijeron: “Estamos hablando entre bastidores”. Las hermanas querían que la embajada hablara públicamente.
Finalmente la embajado lo hizo en diciembre, luego de que Honduras eligiera una nueva presidenta, Xiomara Castro, quien prometió justicia para los medioambientalistas y dijo que abordaría temas como la pobreza y la violencia.
Stokan dijo que estaba “extremadamente esperanzada” con la presidencia de Castro, pero le dijo a oficiales que se enfocaran en algo más que frenar la corrupción.
“Esta presidenta necesitará el apoyo de Estados Unidos para todo el proyecto que está tratando de presentar”, dijo Stokan.