By Carol Glatz
CIUDAD DEL VATICANO (CNS) – No basta con saber de Jesús, hay que tener un encuentro con él, dejarse tocar por su Evangelio y seguirlo, dijo el Papa Francisco.
“Yo puedo conocer muchas cosas de Jesús, pero si no lo he encontrado, entonces yo no sé quién es Jesú”,dijo el Papa a los visitantes y peregrinos que se reunieron con él en la Plaza de San Pedro el 15 de septiembre para el rezo del Ángelus.
“Es necesario este encuentro que cambia la vida: cambia el modo de ser, cambia el modo de pensar, cambia las relaciones que tienes con los hermanos, la disposición a acoger y a perdonar, cambia las elecciones que haces en la vida”, dijo.
En la lectura del Evangelio del día, tomada de San Marcos, Jesús pregunta a sus discípulos: “¿Quién dice la gente que soy yo?”.
Pedro responde correctamente, diciendo que él es el Cristo, dijo el Papa. Sin embargo, Pedro todavía tiene un modo de pensar mundano que cree que el Mesías debe ser fuerte y victorioso, y que nunca puede sufrir ni morir.
“Así que las palabras con las que Pedro responde son ‘correctas’, pero su modo de pensar no ha cambiado”, dijo el Papa Francisco. “Todavía tiene que cambiar su forma de pensar; él todavía tiene que convertirse”.
Este es el mismo mensaje para todos los católicos, que deben preguntarse: “¿Quién es Jesús para tí?”, dijo. No basta con responder con algo aprendido en la clase de catecismo, conocer la doctrina y recitar correctamente las oraciones.
“En realidad, para conocer al Señor no basta con saber algo de Él, sino que es necesario seguirlo, dejarse tocar y cambiar por su Evangelio. Se trata de tener con Él una relación, un encuentro”, dijo.
Los fieles, dijo, deben sentirse interpelados por las preguntas y preguntarse “¿quién es Jesús para mí y qué lugar ocupa en mi vida?”. Añadiendo, según la traducción del Vaticano en inglés, “¿Sigo a Jesús sólo de palabra, continuando con una mentalidad mundana, o me propongo seguirle, permitiendo que el encuentro con Él transforme mi vida?”
“¡Todo cambia si has conocido de verdad a Jesús!”, dijo el Papa.