Cuba liberará a 553 presos por el Jubileo a pedido del Papa Francisco

Por Justin McLellan

CIUDAD DEL VATICANO (CNS) – Retomando el espíritu del recién inaugurado Año Santo 2025, el gobierno cubano ha anunciado la liberación de 553 personas que actualmente cumplen penas de prisión.

Cuba dijo que liberaría gradualmente a los prisioneros “en el espíritu del Jubileo Ordinario de 2025 declarado por Su Santidad” después de un “análisis cuidadoso” de las vías legales y humanitarias para promulgar su liberación, anunció el Ministerio de Relaciones Exteriores de Cuba en una declaración el 14 de enero.

La declaración no especificaba quiénes estarían entre los 553 presos designados para ser liberados.

Ese mismo día, la Casa Blanca anunció que dejaría de designar a Cuba como un país patrocinador del terrorismo y que eliminaría algunas restricciones impuestas a Cuba.

La bandera de Cuba se ve mientras el Papa Francisco llega para celebrar Misa en la Plaza de la Revolución en La Habana en esta foto de archivo del 20 de septiembre de 2015. (Foto CNS/Paul Haring)

La Casa Blanca dijo que las acciones eran pasos “para apoyar al pueblo cubano como parte de un entendimiento con la Iglesia Católica bajo el liderazgo del Papa Francisco y mejorar los medios de vida de los cubanos”.

“Tomamos estas medidas en agradecimiento a los esfuerzos de la Iglesia Católica para facilitar que Cuba tome sus propias medidas constructivas para restaurar la libertad de sus ciudadanos y permitir condiciones que mejoren el sustento de los cubanos”, dijo la declaración de la Casa Blanca.

El cardenal Pietro Parolin, secretario de Estado del Vaticano, dijo que el anuncio de Cuba “es un signo de gran esperanza al comienzo de este Jubileo”, informó Vatican News el 15 de enero, y dijo: “Es significativo que las autoridades de La Habana vinculen esta decisión directamente al llamado del Papa Francisco”.

El cardenal dijo que otros signos prometedores para el Año Jubilar incluyen la decisión del presidente de Estados Unidos, Joe Biden, de conmutar las penas de muerte de decenas de reclusos federales y la abolición de la pena de muerte en Zimbabue en 2024.

“Esperamos que 2025 continúe en esta dirección y que las buenas noticias se multipliquen, especialmente con una tregua para los numerosos conflictos en curso”, afirmó el cardenal Parolin.

Tras el anuncio, el cardenal Seán P. O’Malley, arzobispo emérito de Boston, dijo que durante los últimos años había llevado mensajes del Papa Francisco a los presidentes de Estados Unidos y Cuba “buscando la liberación de los presos en Cuba y la mejora de las relaciones entre los dos países por el bien del pueblo cubano”.

En el espíritu del Jubileo, que invita a todas las personas a fomentar el perdón, la reconciliación y diversas expresiones de compasión, “elogio y doy la bienvenida a las decisiones del gobierno de los Estados Unidos y del gobierno de Cuba de dar pasos que durante años han parecido imposibles”, dijo el cardenal el 14 de enero en un blog.

El comunicado de la cancillería cubana sobre la excarcelación de los más de 500 presos no mencionó las medidas de Estados Unidos, pero señaló las discusiones entre el presidente cubano Miguel Díaz-Canel, el canciller cubano y el Papa Francisco sobre temas internacionales  y, según el comunicado de Cuba, “se profundizó en la naturaleza injusta y el efecto nocivo de la política de Estados Unidos hacia Cuba”.

“Su Santidad ha dado muestras claras de simpatía y afecto hacia el pueblo cubano”, añadía.

En su bula de convocación en la que proclamó formalmente el Año Santo 2025, el Papa Francisco pidió a los gobiernos que pongan en marcha “formas de amnistía o de condonación de la pena”, así como “itinerarios de reinserción” para los presos. Tras inaugurar el Año Santo 2025 en el Vaticano, el Papa abrió una Puerta Santa en la prisión Rebibbia de Roma el 26 de diciembre como símbolo de esperanza para todas las personas encarceladas.

El último gran acontecimiento del Año Santo será el “Jubileo de los presos”, previsto para diciembre de 2025, durante el cual los reclusos peregrinarán a la Basílica de San Pedro y celebrarán Misa con el Papa.