‘Peregrinos de la esperanza’: El Vaticano se prepara para acoger a millones de personas durante el Año Santo

Por Cindy Wooden
CIUDAD DEL VATICANO (CNS) – La celebración de un Año Santo cada 25 años es un reconocimiento de que “la vida cristiana es un camino, que también necesita momentos fuertes para alimentar y robustecer la esperanza, compañera insustituible que permite vislumbrar la meta: el encuentro con el Señor Jesús”, escribió el Papa Francisco.

Al abrir la Puerta Santa de la Basílica de San Pedro en Nochebuena, el Papa inaugurará formalmente el Año Jubilar 2025 – que contará con peregrinaciones individuales, parroquiales y diocesanas y con celebraciones especiales centradas en grupos específicos, desde migrantes a bandas de música, catequistas a comunicadores y sacerdotes a presos.

En el interior de la basílica vaticana, la puerta estaba tapiada desde el 20 de noviembre de 2016, cuando el Papa Francisco clausuró el Jubileo extraordinario de la Misericordia.

El desmantelamiento del muro de ladrillo comenzó el 2 de diciembre en medio de oraciones e incluyó la retirada de una caja que contenía la llave de la puerta y medallas vaticanas. Las Puertas Santas de las basílicas de San Juan de Letrán, Santa María la Mayor y San Pablo Extramuros serían liberadas de sus ladrillos en la semana siguiente.

En enero de 2021, mientras el mundo luchaba por volver a una cierta normalidad tras lo peor de la pandemia del COVID-19, el Papa Francisco anunció que había elegido “Peregrinos de la esperanza” como tema del Jubileo.

El Papa Francisco abre la Puerta Santa de la Basílica de San Pedro para inaugurar el Año Jubilar de la Misericordia en el Vaticano en esta foto de archivo del 8 de diciembre de 2015. Volverá a abrir la Puerta Santa el 24 de diciembre de 2024 para el Año Jubilar de la Esperanza. (Foto por CNS/Vatican Media)

“Debemos mantener encendida la llama de la esperanza que nos ha sido dada, y hacer todo lo posible para que cada uno recupere la fuerza y la certeza de mirar al futuro con mente abierta, corazón confiado y amplitud de miras”, escribió el Papa en una carta en la que encomendaba la organización del Jubileo al arzobispo Rino Fisichella, presidente del entonces Consejo Pontificio para la Promoción de la Nueva Evangelización.

El Papa rezaba para que el Año Santo estuviera marcado por “una fe gozosa y una caridad entusiasta”.

Un año santo o jubileo es un tiempo de peregrinación, oración, arrepentimiento y actos de misericordia, basado en la tradición del Antiguo Testamento de un año jubilar de descanso, perdón y renovación. Los años santos también son un tiempo en el que los católicos peregrinan a iglesias y santuarios designados, recitan oraciones especiales, se confiesan y comulgan para recibir la indulgencia plenaria, que es una remisión del castigo temporal debido por los pecados cometidos.

Cruzar el umbral de la Puerta Santa no da a una persona acceso automático a la indulgencia o a la gracia, como dijo San Juan Pablo II en su documento de proclamación del Año Santo 2000. Pero atravesar la puerta es un signo del paso del pecado a la gracia que todo cristiano está llamado a realizar.

“Pasar por aquella puerta significa confesar que Cristo Jesús es el Señor, fortaleciendo la fe en Él para vivir la vida nueva que nos ha dado. Es una decisión que presupone la libertad de elegir y, al mismo tiempo, el valor de dejar algo, sabiendo que se alcanza la vida divina”, escribió San Juan Pablo II.

El Papa Bonifacio VIII proclamó el primer Año Santo en 1300 y decretó que los jubileos se celebrarían cada 100 años. Pero sólo 50 años después, con una cadencia más bíblica, el Papa Clemente VI proclamó otro año jubilar.

El Papa Pablo II decidió en 1470 que los años santos debían celebrarse cada 25 años, que ha sido la práctica desde entonces – pero con la adición de jubileos especiales, como el Año Santo de la Misericordia en 2015-16, marcando ocasiones o necesidades especiales.

El Jubileo de la Misericordia se centró especialmente en animar a los católicos a volver a confesarse, pero el sacramento es una parte clave de cada Año Santo.

El Papa Francisco, en su bula de convocación para el Año Santo 2025, dijo que las iglesias son lugares donde podemos “beber de los manantiales de la esperanza, sobre todo acercándose al sacramento de la Reconciliación, punto de partida insustituible para un verdadero camino de conversión”.

El Papa también pidió a los católicos que aprovecharan el Año Jubilar para alimentar o ejercitar su esperanza buscando activamente signos de la gracia y la bondad de Dios a su alrededor.

“Es necesario poner atención a todo lo bueno que hay en el mundo para no caer en la tentación de considerarse superados por el mal y la violencia”, escribió. “Los signos de los tiempos, que contienen el anhelo del corazón humano, necesitado de la presencia salvífica de Dios, requieren ser transformados en signos de esperanza”.

Incluso en un mundo convulso, uno puede darse cuenta de cuántas personas rezan y manifiestan su deseo de paz, de salvaguardar la creación y de defender la vida humana en todas sus etapas, afirmó. Son signos de esperanza que no se pueden descartar.

Como parte del Jubileo 2025, el Papa Francisco ha anunciado la canonización del Beato Carlo Acutis el 27 de abril durante el jubileo especial para los Adolescentes y la proclamación de la santidad del Beato Pier Giorgi Frassati el 3 de agosto durante el Jubileo para los Jóvenes Adultos.

Las vidas de los dos hombres, católicos activos que murieron jóvenes, son emblemáticas de la convicción del Papa Francisco de que la esperanza, fundada en la fe y alimentada por la caridad, es lo que permite a las personas seguir adelante en la vida a pesar de los reveses y las pruebas.

Ambos jóvenes italianos sabían que la esperanza que extraían de la fe debía compartirse con los demás a través de sus palabras, su forma de actuar y su caridad.

El Papa Francisco, en la bula de convocatoria de este jubileo, dijo a los católicos que “durante el Año Jubilar estamos llamados a ser signos tangibles de esperanza para tantos hermanos y hermanas que viven en condiciones de penuria’.

Además de los actos individuales de caridad, amor y bondad como dar de comer al hambriento, acoger al forastero o visitar a los enfermos y encarcelados, el Papa Francisco ha continuado la práctica de sus predecesores de observar el jubileo pidiendo a los gobiernos que reduzcan la deuda externa de los países más pobres, concedan la amnistía a algunos presos y refuercen los programas para ayudar a los migrantes y refugiados a establecerse en sus nuevos hogares.

Italia y la ciudad de Roma mantienen una de las tradiciones más trabajosas y tensas de un año santo: Las obras en las carreteras y la restauración o limpieza de monumentos, fuentes y edificios importantes. A sólo tres semanas de la apertura de la Puerta Santa, ninguno de los grandes proyectos estaba terminado, pero el alcalde Roberto Gualtieri prometió a finales de noviembre que la mayoría de las carreteras se abrirían y la mayor parte de los andamios se retirarían antes del 1 de enero.

El arzobispo Fisichella, principal organizador vaticano del Año Jubilar, declaró a finales de noviembre que el Vaticano había encargado a una universidad que pronosticara la afluencia de peregrinos y turistas durante el Año Santo. El resultado fue una previsión de 32 millones de visitantes a Roma.

La página web multilingüe del jubileo – www.iubilaeum2025.va – funciona desde hace meses e incluye la posibilidad de reservar hora para atravesar la Puerta Santa de San Pedro y de las demás basílicas mayores de Roma.

La Conferencia de los Obispos Católicos de Estados Unidos también tiene una sección especial en su página web – www.usccb.org/committees/jubilee-2025 – con información sobre cómo viajar a Roma con motivo del Año Santo y para celebrar los jubileos especiales en cada diócesis o parroquia.

Los obispos de Nuevo México instan a Trump a reconsiderar los planes de deportación masiva

Por Kate Scanlon
(OSV News) – La próxima administración de Trump debería “reconsiderar” sus planes de llevar a cabo deportaciones masivas, escribieron los obispos de Nuevo México en una carta abierta.

El presidente electo Donald Trump hizo campaña con políticas de inmigración de línea dura, incluyendo su llamado a las deportaciones masivas, argumentando en un debate presidencial en septiembre que los que no tienen estatus legal “destruyeron el tejido de nuestro país”, y desde entonces ha indicado su disposición a utilizar la fuerza militar para un programa de deportación masiva.

Aunque Trump no ha ofrecido detalles concretos sobre cómo llevaría a cabo dicho programa, en principio, las deportaciones masivas son contrarias a la enseñanza del Concilio Vaticano II en “Gaudium et Spes”, que condena la “deportación” entre otras acciones, como el aborto, que “envenenan la sociedad humana”, una enseñanza que San Juan Pablo II afirmó en dos encíclicas sobre la verdad moral y cuestiones relacionadas con la vida.

En su carta, los obispos del estado fronterizo – el arzobispo John C. Wester de Santa Fe, el obispo Peter Baldacchino de Las Cruces, y el obispo James S. Wall de Gallup – afirmaron que la inmigración “sigue siendo un tema complicado y desafiante para el país”.

“Mientras que la Estatua de la Libertad es emblemática de las políticas de migración que han dado a los inmigrantes una nueva oportunidad de vida y han engrandecido a nuestro país, seguimos siendo testigos de trágicos fracasos en nuestra política migratoria que han puesto en gran riesgo a aquellas personas que huyen de la injusticia, la persecución y el crimen”, escribieron. “Además, nuestro fracaso en promulgar una reforma migratoria integral ha debilitado la fibra moral de nuestra sociedad”.

“Desde la experiencia de la Iglesia católica en el trabajo con migrantes y refugiados, encontramos que muchos de los que llegan a nuestra nación se ven obligados a emigrar debido a la opresión y la persecución”, dijeron. “Son víctimas de contrabandistas, traficantes de personas y cárteles de la droga.
Sufren graves dificultades económicas y simplemente quieren mantener a sus familias con dignidad. La mayoría no elige emigrar por capricho, sino que son migrantes forzados, que huyen de condiciones intolerables e inhumanas”.

Los obispos añadieron que, al mismo tiempo, “reconocemos que, como con cualquier grupo, hay quienes vienen por razones nefastas y cometen crímenes violentos, y que los estadounidenses deben ser protegidos de estas personas. Del mismo modo, estamos de acuerdo en que un país soberano tiene derecho a gestionar sus fronteras, aunque de un modo que proteja los derechos humanos y la dignidad”.
Argumentando que el sistema de inmigración “está roto y necesita una reforma”, los obispos dijeron que las políticas “que ignoran los derechos humanos de los que vienen a la frontera y socavan la dignidad humana no son la manera de arreglar las cosas”.

“Si bien es cierto que las naciones soberanas tienen el derecho y la responsabilidad de controlar sus fronteras, no se trata de un derecho absoluto, ya que la gestión de las fronteras debe ir acompañada de un trato humano y de las debidas garantías procesales”, señaló la carta. “Podemos lograr ambos objetivos: la protección de los derechos humanos y la seguridad de la frontera y de la nación”.

Una política de deportación masiva, argumentaron los obispos, no solucionará esos problemas, sino que “creará caos, separación familiar y traumatización de los niños”.

“Aunque expulsar a quienes nos causan daño es necesario, deportar a inmigrantes que han creado capital en nuestras comunidades y no suponen ninguna amenaza es contrario a los principios humanitarios y a nuestro interés nacional”, afirmaron. “Instamos a la nueva administración a que reconsidere esta política de deportación propuesta y, en su lugar, retome las negociaciones bipartidistas para reparar el sistema migratorio de EE.UU.”.

Aunque no son políticos, añadieron, creen que los funcionarios electos deberían adoptar estos principios morales como fundamento de leyes buenas y justas.

“Como nos dicen las Escrituras, de aquellos a quienes se les ha dado mucho, se espera mucho”, decía la carta, en referencia a Lucas 12:48. “Nosotros, los obispos de Nuevo México, rezamos para que los Estados Unidos – nuestra gran nación bajo Dios – continúe recibiendo con justicia a nuestros semejantes en nuestro país, reconociendo los muchos dones que son nuestros en el mundo de gran sufrimiento humano”.

Los obispos añadieron que “están dispuestos a trabajar con la nueva administración para lograr políticas de inmigración que sean justas, humanas y reflejen los valores de Estados Unidos”.

(Kate Scanlon es una reportera nacional de OSV News que cubre Washington. Síguela en X (antes Twitter) @kgscanlon.)

La esperanza encarnada: la Navidad y el año jubilar

Por Obispo Joseph R. Kopacz, D.D.
“El Verbo se hizo carne y habitó en medio, y vimos su gloria, la gloria como del Hijo unigénito del Padre, lleno de gracia y de verdad”. (Juan 1:14)

Este versículo del prólogo del Evangelio de San Juan es el anuncio por excelencia de nuestra fe navideña. Las narraciones de la infancia de San Mateo y San Lucas, escritas una generación antes de San Juan, imparten la amada narración del nacimiento del Señor, la esencia de la escena del pesebre de Navidad en todo su esplendor que todos conocemos y amamos. Pero el prólogo del Evangelio de Juan, representado por el águila, nos lleva a las alturas de nuestra comprensión de la Palabra eterna de Dios sin la participación de María, José, los pastores o los magos. Sin embargo, de una manera impresionante y atemporal, las introducciones a los tres Evangelios se combinan para revelar la singularidad, la armonía y la diversidad de los evangelistas. Somos iluminados por el aliento y la profundidad de la Palabra de Dios en Navidad.

Obispo Joseph R. Kopacz

Esta Navidad somos doblemente bendecidos con la inauguración del Año Jubilar de la Esperanza, cuando el Papa Francisco abre las puertas santas de las cuatro basílicas de Roma. Cruzar los umbrales del hogar y de la iglesia a través de una puerta abierta con amorosa hospitalidad es siempre un momento de gracia y paz.

Muchos lamentan el triste estado de las puertas cerradas en las iglesias en el mundo moderno, mientras entienden la necesidad de la seguridad. El acceso total a Dios en nuestros sagrados lugares de adoración nos llevaría de vuelta a días mejores y proporcionaría mucho consuelo en un mundo que parece estar perdiendo su alma. En este sentido, la apertura de la Puerta Santa para iniciar el Año Jubilar está llena de significado.

El Papa Francisco ofrece esta perspectiva: “Sostenido por esta gran tradición, y con la certeza de que el Año Jubilar será para toda la Iglesia una experiencia viva de gracia y esperanza, por el presente decreto que la Puerta Santa de la Basílica de San Pedro en el Vaticano se abra el 24 de diciembre de 2024, inaugurando así el Jubileo Ordinario. El domingo siguiente, 29 de diciembre de 2024, abriré la Puerta Santa de mi catedral, San Juan de Letrán, que el 9 de noviembre de este año celebrará los 1700 años de su dedicación. Luego, el 1 de enero de 2025, la solemnidad de María, Madre Dios, se abrirá la Puerta Santa de la Basílica Papal, Santa María la Mayor. Por último, el domingo 5 de enero de 2025 se abrirá la Puerta Santa de la Basílica Papal de San Pablo Fuera de las Murallas”.

En la Diócesis de Jackson, inauguraremos el Año Santo en la fiesta de la Epifanía, el 5 de enero de 2025 en nuestra Catedral del Apóstol San Pedro, invitando a los fieles a cruzar el umbral de la esperanza implorando un año de gracia y favor del Señor. Con la Iglesia Católica universal, el año Jubileo de la Esperanza concluirá en la fiesta de la Epifanía, en enero de 2026.

Lo que hace que la apertura de la Puerta Santa esté aún más llena de significado es que Dios primero abrió las puertas del paraíso para nosotros aquí en la tierra a través de la Encarnación, vida, muerte y resurrección de Jesucristo. Dios extendió la alfombra roja hasta el salón de banquetes celestial para que podamos caminar sobre él como peregrinos seguros de sí mismos que han sido lavados en la Sangre del Cordero. En el nivel más profundo, tenemos acceso total a la presencia de Dios a través de la morada del Espíritu Santo, cuyos templos somos. Llevamos esta vida con nosotros dondequiera que vayamos como portadores de Dios y peregrinos de esperanza para nuestras propias vidas y para la vida del mundo.

Que nos inspiremos unos a otros con la convicción de que “la esperanza no defrauda porque el amor de Dios ha sido derramado en nuestros corazones por el Espíritu Santo”. (Romanos 5:5) A la luz de la fe que brilla en la oscuridad podemos bendecirnos unos a otros. ¡Feliz Navidad!

Diez cosas que debes saber sobre el Jubileo 2025, el Año Santo que empieza en diciembre de 2024

(OSV News) – Carteles alrededor de la Ciudad Eterna anuncian “Roma si trasforma” — “Roma se transforma” — como explicación de los proyectos, presentes en todas partes, de infraestructura en curso, incluyendo la restauración de esculturas y monumentos icónicos, de cara al Jubileo 2025, un Año Santo que comienza en la víspera de Navidad.

Mientras la metrópolis aprovecha la oportunidad para renovarse, esa es, en última instancia, la expectativa del jubileo para toda la Iglesia. “Que (el Jubileo) pueda ser para todos un momento de encuentro vivo y personal con el Señor Jesús, ‘puerta’ de salvación, con Él, a quien la Iglesia tiene la misión de anunciar siempre, en todas partes y a todos como ‘nuestra esperanza'”, escribió el Papa Francisco en el documento donde declaró oficialmente el Año Santo.

Este es el logotipo en español elegido por el Vaticano para el Año Santo 2025. El Papa Francisco eligió el lema “Peregrinos de esperanza” para el año jubilar, marcado por las peregrinaciones, la oración, el arrepentimiento y los actos de misericordia. (Foto OSV News/Vatican Media) EDITORES: SÓLO PARA USO EDITORIAL. VER NOTAS DE USO MÁS ABAJO. LOGO GIUBILEO 2025 We would like to notify you that we authorize you to use the 2025 Jubilee logo for pastoral and non profit purposes only. Said use of the logo is to follow the pastoral and ecclesial initiatives and any other initiatives with no commercial purposes, listed below: 1. Placing the logo on materials related to the 2025 Jubilee. For example: Put the mark on materials related to the Jubilee 2025 such as leaflets, pamphlets, postcards, brochures, posters, profiles, banners, websites and other media; 2. Placing the logo on pastoral materials to be used for spiritual preparation for the 2025 Jubilee; 3. Displaying the logo on promotional materials related to the 2025 Jubilee, especially on posters, banners, shirts, hats, mugs and other materials, ensuring it is not commercially used. Third parties do not have and should not be conceded the rights for the use of the logo.

He aquí 10 cosas que debes saber sobre el próximo Año Jubilar:

  1. Año Jubilar, también conocido como “Año Santo”, es un año especial en la vida de la Iglesia que actualmente se celebra cada 25 años. El jubileo ordinario más reciente fue en el año 2000, mientras que el Papa Francisco convocó un Año Jubilar Extraordinario de la Misericordia en 2015-2016. Los Años Jubilares se celebran a intervalos regulares en la Iglesia Católica desde 1300, pero tienen sus raíces en la tradición judía de marcar un año jubilar cada 50 años.

Según el sitio web del Vaticano para el jubileo, estos años en la historia judía “se proponía como la ocasión para restablecer la correcta relación con Dios, con las personas y con la creación, y conllevaba el perdón de las deudas, la restitución de terrenos enajenados y el descanso de la tierra”.

  1. El Jubileo 2025 comienza a las 7:00 p.m. en la víspera de Navidad, el 24 de diciembre, con el rito de apertura de la Puerta Santa en la Basílica de San Pedro en el Vaticano, inmediatamente antes de que el Papa Francisco celebre la Misa de Medianoche. Las Puertas Santas también se abrirán en las cuatro principales basílicas de Roma: San Juan de Letrán, el 29 de diciembre; Santa María la Mayor, el 1 de enero; San Pablo Extramuros, el 5 de enero.

Sin embargo, primero se abrirá una Puerta Santa el 26 de diciembre en la prisión de Rebibbia, una cárcel romana que el Papa Francisco ha visitado dos veces antes para celebrar Misa y lavar los pies de los reclusos en Jueves Santo.

Las puertas representan el paso hacia la salvación que Jesús abrió a la humanidad. En 1423, el Papa Martín V abrió por primera vez la Puerta Santa en la Basílica de San Juan de Letrán — la catedral de la Diócesis de Roma — para un jubileo. Para el Año Santo de 1500, el Papa Alejandro VI abrió Puertas Santas en las cuatro principales basílicas de Roma. Al final de un Año Santo, las Puertas Santas se cierran formalmente y luego son tapiadas.

  1. El tema del Año Santo es “Peregrinos de la Esperanza”. La bula papal, emitida el 9 de mayo, que presentó el próximo Año Jubilar, se titula “Spes non confundit”, o “La esperanza no defrauda”, tomado de Romanos 5, 5. “Todos esperan”, escribió el Papa Francisco. “En el corazón de toda persona anida la esperanza como deseo y expectativa del bien, aun ignorando lo que traerá consigo el mañana”.

“Sin embargo, la imprevisibilidad del futuro hace surgir sentimientos a menudo contrapuestos: de la confianza al temor, de la serenidad al desaliento, de la certeza a la duda”, continuó. “Encontramos con frecuencia personas desanimadas, que miran el futuro con escepticismo y pesimismo, como si nada pudiera ofrecerles felicidad. Que el Jubileo sea para todos ocasión de reavivar la esperanza”.

El Papa Francisco también espera que este año acerque a los católicos a la paciencia, que describió en “Spes non confundit” como una “virtud estrechamente relacionada con la esperanza”, pero que puede parecer esquiva en un mundo en el que “estamos acostumbrados a quererlo todo y de inmediato”.

  1. Los años jubilares, que tienen raíces judías, enfatizan el sacramento de la reconciliación y la restauración de relaciones con Dios. También ofrecen la oportunidad de una indulgencia jubilar especial, que puede eliminar los efectos residuales del pecado mediante la gracia de Cristo.
  2. El Año Santo llama a los cristianos a la acción. El Papa Francisco pidió “signos de esperanza” en el año jubilar, como el deseo de paz en el mundo, la apertura a la vida y la paternidad responsable, la cercanía con los prisioneros, los pobres, los enfermos, los jóvenes, los ancianos, los migrantes, y las personas “en situaciones de catástrofe o de inestabilidad social”. El Papa Francisco también instó a los países ricos a perdonar las deudas de aquellos países que nunca podrán pagarlas y a abordar la “deuda ecológica”, que describió como “relacionada con desequilibrios comerciales con consecuencias en el ámbito ecológico, así como con el uso desproporcionado de los recursos naturales llevado a cabo históricamente por algunos países”.
  3. Se espera un flujo masivo de peregrinos en la Ciudad Eterna. El Instituto Nacional de Investigación Turística de Italia proyecta 35 millones de visitantes en 2025, casi el triple de los 13 millones registrados en 2023. La peregrinación es una parte “fundamental” de los eventos jubilares, señaló el Papa Francisco en “Spes non confundit”. “Ponerse en camino es un gesto típico de quienes buscan el sentido de la vida. La peregrinación a pie favorece mucho el redescubrimiento del valor del silencio, del esfuerzo, de lo esencial”, escribió.

Se espera que los peregrinos jubilares visiten las catacumbas cristianas de Roma y sus siete iglesias de peregrinación: las basílicas de San Pedro, Santa María la Mayor, San Juan de Letrán, San Pablo Extramuros, San Lorenzo, Santa Cruz, y San Sebastián, destinos popularizados por San Felipe Neri en el siglo XVI con una caminata de 15 millas. Además, otras 12 iglesias romanas, incluido el Santuario del Divino Amor en el sureste de Roma, han sido designadas como “iglesias jubilares”, destinadas a ser puntos de encuentro para los peregrinos durante el jubileo.

Expertos de la industria del turismo y la hospitalidad sugieren que quienes planeen viajar a Roma en 2025, ya sean peregrinos o no, reserven alojamiento, entradas, y visitas con antelación. Los visitantes también podrían enfrentarse a un aumento del impuesto turístico, dependiendo del tipo de alojamiento.

  1. Habrá eventos importantes en Roma. Entre ellos, reuniones jubilares con liturgias, ponencias y audiencias papales para celebrar a distintos grupos dentro de la Iglesia. El primero será el Jubileo del Mundo de las Comunicaciones, del 24 al 26 de enero, seguido por el Jubileo de las Fuerzas Armadas, Policía y Personal de Seguridad, del 8 al 9 de febrero. También habrá encuentros para artistas (15-18 de febrero), diáconos (21-23 de febrero), e incluso bandas de música (10-11 de mayo).

Algunos de estos eventos coincidirán con canonizaciones importantes, como la del beato Carlo Acutis durante el Jubileo de los Adolescentes (25-27 de abril) y la del beato Pier Giorgio Frassati durante el Jubileo de la Juventud (28 de julio-3 de agosto).

Se espera que algunos eventos destaquen el 1700 aniversario del Concilio de Nicea, donde los cristianos recibieron el Credo Niceno. Este año, pese a los diferentes calendarios litúrgicos, las fechas de celebración de la Pascua coinciden entre la Iglesia Católica y la ortodoxa, lo que ha llevado a algunos, incluyendo el Papa Francisco, a abogar por “un paso decisivo hacia la unidad en torno a una fecha común para la Pascua”, tema discutido en el Concilio de Nicea de 325.

  1. Se espera que Roma brille y resplandezca. Muchos sitios y obras de arte famosos en Roma y en el Vaticano han sido limpiados o restaurados para el jubileo, algo que decepcionó a muchos turistas en 2024, quienes encontraron monumentos importantes cubiertos por cercas, andamios, y lonas. Se espera que muchos de estos proyectos concluyan a tiempo, con una cara fresca, renovada para el jubileo. En octubre, la Basílica de San Pedro presentó su baldaquino recién restaurado, diseñado por Gian Lorenzo Bernini en el siglo XVII, después de 10 meses de trabajo. También se están limpiando o restaurando la Pietà de Miguel Ángel, la Fuente de los Cuatro Ríos de Bernini en la Piazza Navona, y los ángeles de Bernini en el Puente Sant’Angelo.
  2. Aunque muchos eventos jubilares tendrán lugar en Roma y el Vaticano, es una celebración para toda la Iglesia. El 29 de diciembre, se espera que los obispos diocesanos inauguren el Año Santo localmente con Misas en sus catedrales y cocatedrales. Se anima a los católicos a hacer peregrinaciones a sus catedrales durante el año y a estar atentos a las comunicaciones diocesanas para eventos locales. Aunque el Papa Francisco alentó a los obispos a designar Puertas Santas en sus propias catedrales durante el Jubileo de la Misericordia en 2015, este año solo habrá Puertas Santas en el Vaticano y en Roma.
  3. El Año Jubilar concluye con el cierre de la Puerta Santa en la Basílica de San Pedro el 6 de enero de 2026, en la festividad de la Epifanía. Sin embargo, las Puertas Santas de las otras grandes basílicas de Roma se cerrarán el 28 de diciembre de 2025, el mismo día en que las diócesis finalizarán las celebraciones locales del Año Santo.

El Año Jubilar también mira hacia el 2033, cuando la Iglesia conmemorará el 2000 aniversario de la pasión, muerte, y resurrección de Jesús, celebración que el Papa Francisco calificó como “otro aniversario fundamental para todos los cristianos”.

La caridad va más allá que la ayuda material, dice el Papa

Por Justin McLellan, Catholic News Service

CIUDAD DEL VATICANO (CNS) – La caridad implica algo más que ofrecer ayuda material a los necesitados; también exige un compromiso para fomentar el cambio social, dijo el Papa Francisco.

Los que se dedican a la caridad deben aceptar “el desafío de ser motor de cambio dentro de la sociedad mediante la difusión del espíritu de caridad y de justicia”, dijo el 5 de diciembre durante una reunión con miembros de Cáritas, el brazo caritativo de la Archidiócesis de Toledo, España.

El Papa Francisco recibe un regalo de los trabajadores de Cáritas de la Archidiócesis de Toledo, España, durante una reunión en el Vaticano el 5 de diciembre de 2024. (Foto CNS/Vatican Media)

A través de su dedicación al servicio, los trabajadores de la caridad pueden “despertar en todos los que tengan buena voluntad una conciencia más fraterna” que a veces “se adormenta” o no crece, dijo el Papa.

Según las estadísticas de la arquidiócesis, las iniciativas de Cáritas en la Archidiócesis de Toledo ayudaron a 23.526 personas en 2023, distribuyendo más de 5 millones de euros para combatir diversas formas de pobreza.

Miembros de la organización viajaron a Roma con motivo del 60 aniversario de su fundación.

Un profundo compromiso con la caridad es lo que distingue a Cáritas de otras organizaciones cívicas o filantrópicas, permitiéndoles ser “instrumentos de evangelización, a través del lenguaje universal de las obras de caridad”, dijo el Papa.

Las obras de caridad, dijo el Papa Francisco, “no necesitan traductor, no hay un diccionario para traducir, es lenguaje universal”.

Las obras de caridad “las entiende todo el mundo”, dijo. “Es un idioma comprensible para todos, escrito con el testimonio y el esfuerzo de todos los agentes de Cáritas, comprometidos con Jesucristo y con su Evangelio”.

El Papa dijo que responder a las necesidades de los pobres requiere que los individuos cultiven sus talentos únicos a través de una “formación humana y espiritual” que les prepare para abordar los retos sociales en constante evolución a la luz de la doctrina social de la Iglesia.

El Papa animó a los miembros de Cáritas a defender la doctrina social de la Iglesia con “el espíritu de colaboración y sinodalidad con tantas realidades pastorales que conforman el conjunto de la Iglesia diocesana”.

También pidió a los trabajadores de la caridad que sirvieran como maestros “de esa sabiduría que el mundo necesita con tanta urgencia”: la sabiduría de Cristo, transmitida a través de la oración y los sacramentos. Esta sabiduría es especialmente vital hoy en día, dijo el Papa Francisco, en un mundo donde “se vende y se compra la necedad” a precios caros.

En medio de los preparativos para la Navidad y el Jubileo, preparen sus corazones, dice el Papa

By Cindy Wooden
ROMA (CNS) – Con la ciudad de Roma presentando numerosas obras viales y grandes proyectos de construcción antes de la apertura del Año Santo 2025, el Papa Francisco aprovechó las interrupciones causadas por dichas obras como una oportunidad para alentar a las personas a hacer algo de renovación espiritual antes del jubileo.

En una tarde nublada con amenaza de lluvia, el 8 de diciembre, fiesta de la Inmaculada Concepción, el Papa Francisco se dirigió al centro de Roma para continuar la tradición de rezar ante una estatua de María en lo alto de una columna cerca de la Plaza de España.

Ese día, al amanecer, los bomberos de Roma subieron casi 90 pies (más de 27 metros) utilizando un camión y una escalera para colocar un anillo de flores blancas en el brazo extendido de María y ramos a sus pies, continuando una tradición romana que comenzó en 1949.

El Papa Francisco lleva un ramo de rosas blancas a los pies de una estatua mariana cerca de la Plaza de España en Roma el 8 de diciembre de 2024, fiesta de la Inmaculada Concepción. (Foto CNS/Lola Gomez)

El Papa Francisco llevó su propia cesta de rosas blancas atadas con una cinta vaticana amarilla y blanca y, como es su costumbre, recitó una oración a María en lugar de pronunciar un discurso ante los miles de romanos, visitantes y turistas.

El alcalde de Roma, Roberto Gualtieri, estaba presente en la celebración. Gualtieri se ha visto acosado por las críticas sobre cómo los grandes proyectos jubilares, la mayoría de los cuales aún están incompletos, han congestionado el tráfico y decepcionado a los turistas que esperaban ver lugares de interés pero que los encontraron cubiertos de andamios.

Dirigiéndose a María, dijo que su “mirada de madre” ve más allá del caos de la construcción. “Y me parece escuchar tu voz que con sabiduría nos dice: “Hijos míos, están bien estas obras, pero estén atentos, ¡no se olviden de las obras del alma!”.

El Papa Francisco agradeció a María la sugerencia “porque, sin quererlo, corremos el riesgo de ser presas totalmente de la organización, de todas las cosas por hacer”, con el riesgo de que se sofoque “la gracia del Año Santo, que es un tiempo de renacimiento espiritual, de perdón y de liberación social”.

También pidió a la gente que rezara por el alcalde, “que tiene tanto que hacer”.

Con el lema “Peregrinos de esperanza”, el Papa tiene previsto inaugurar el Año Santo en la Basílica de San Pedro antes de la Misa del 24 de diciembre. También abrirá una Puerta Santa en la cárcel Rebibbia de Roma el 26 de diciembre. La Puerta Santa de la Basílica de San Juan de Letrán se abrirá el 29 de diciembre; la de la Basílica de Santa María la Mayor, el 1 de enero; y la de San Pablo Extramuros, el 5 de enero.

El Papa Francisco dio las gracias a María “porque todavía, en este tiempo pobre de esperanza, nos das a Jesús, ¡nuestra esperanza! ¡Gracias Madre!”

Breves de la Nación y el Mundo

NACIÓN
NUEVA YORK (OSV News) – La Misa anual en honor a La Inmaculada Concepción de María – La Purísima, patrona de Nicaragua, se celebró el domingo 1 de diciembre en la Catedral de San Patricio. “Hoy nos reunimos para celebrar el Primer Domingo de Adviento – y hoy nosotros, la comunidad nicaragüense, también honramos a una mujer santa (María La Purísima) quien nos une y le damos gracias”, dijo el celebrante, el padre Pedro Bismarck Chau, rector de la Catedral Basílica del Sagrado Corazón en Newark, Nueva Jersey. Más de 1.000 personas asistieron a la liturgia de la tarde. Entre ellos estaba Alicia Jiménez, nacida en Nicaragua y madre de tres hijos. “Ella es la patrona de Nicaragua; esto es muy importante para nosotros; es parte de nuestra fe, que lo es todo para nosotros. Esta (Misa anual) es maravillosa”, Jiménez, una feligresa de Nuestra Señora de Lourdes en Manhattan, dijo a The Good Newsroom, el medio de noticias de la Arquidiócesis de Nueva York. “¿Quién causa tanta alegría?” exclamó el padre Chau, nacido y criado en Nicaragua. Y la gente respondió: “¡La Concepción de María!” Es un intercambio tradicional de La Gritería, un alegre grito nicaragüense de fe, esperanza y amor por María La Purísima, cuya fiesta es el 8 de diciembre, que coincide con la solemnidad de la Inmaculada Concepción.

WASHINGTON (OSV News) – Es posible que la administración entrante del presidente electo Donald Trump planee rescindir una política de larga data que impide a los agentes del Servicio de Inmigración y Control de Aduanas (ICE) realizar detenciones en lo que se consideran áreas protegidas, incluyendo lugares de culto, escuelas y hospitales, según un informe de NBC News. Según las fuentes del informe, Trump, quien se ha comprometido a llevar a cabo “el mayor programa de deportación en la historia de Estados Unidos”, planea desechar la política de larga data de ICE – que prohíbe las detenciones por razones migratorias en esos lugares, así como otros eventos sensibles como bodas y funerales sin la aprobación de supervisores – tan pronto como el primer día de su nuevo mandato. El equipo de transición Trump-Vance no respondió inmediatamente a una solicitud de comentario de OSV News sobre el informe. Kevin Appleby, investigador principal de política en el Centro de Estudios Migratorios de Nueva York y ex director de política migratoria de la Conferencia de Obispos Católicos de EE.UU. (USCCB) dijo que los supuestos planes serían “una violación de la libertad religiosa y disuadirá a las familias inmigrantes de asistir a misa y recibir los sacramentos” y calificó la propuesta de “un ataque a la vida de la Iglesia en este país, (así) como contra las familias migrantes”. Chieko Noguchi, portavoz de la USCCB, dijo que los obispos de EE.UU. son “conscientes de las diversas propuestas que se están debatiendo con respecto a la inmigración, y nos estamos preparando para hacer frente a una serie de políticas, y nos comprometeremos adecuadamente cuando las políticas públicas sean presentadas”.

VATICANO
CIUDAD DEL VATICANO (CNS) – Reducir el mensaje de Nuestra Señora de Guadalupe a otra cosa que no sea una expresión de la maternidad universal de María disminuye la verdadera esencia de la icónica devoción mariana, dijo el Papa Francisco. El misterio guadalupano se trata de venerarla y escuchar en nuestros oídos: “¿Acaso no estoy yo aquí, que soy tu madre?”, dijo el Papa, refiriéndose a las palabras que se dice que María dijo a San Juan Diego. “Este es el mensaje guadalupano. Lo demás, son ideologías”, dijo en su homilía en la Misa en honor a la fiesta de Nuestra Señora de Guadalupe en la Basílica de San Pedro. El Papa Francisco presidió la Misa sentado, pronunciando una breve homilía sin leer un texto preparado. El cardenal Robert F. Prevost, prefecto del Dicasterio para los Obispos y presidente de la Pontificia Comisión para América Latina, fue el celebrante principal en el altar. “Sobre este misterio de Guadalupe, que lamentablemente tantas ideologías han querido derivar para sacar provecho ideológico, me vienen en mente tres cosas … la tilma, la Madre y la rosa”, dijo el Papa en español, recordando que el verdadero mensaje de Guadalupe reside en su sencillez. La devoción a Nuestra Señora de Guadalupe está profundamente arraigada en América Latina y vinculada a las apariciones marianas del siglo XVI en México. Según la tradición, la Virgen María se apareció a San Juan Diego, un indígena mexicano, y dejó su imagen impresa en su manto. La imagen representa a María embarazada, y se dice que las rosas – flores poco comunes a la región en esa época – se derramaron milagrosamente de su manto cuando se lo presentó al obispo.

MUNDO
BUENOS AIRES (OSV News) – El clero católico de México ha pedido una tregua el 12 de diciembre, fiesta de Nuestra Señora de Guadalupe, y el día de Navidad, mientras la violencia criminal asola franjas del país y el clero que trabaja en regiones conflictivas se ve amenazado. El obispo auxiliar de Ciudad de México, Francisco Javier Acero Pérez, instó a la tregua, diciendo en un foro de discurso para líderes católicos el 5 de diciembre en la Universidad Panamericana: “Podemos mostrar al mundo que, por medio de la Virgen de Guadalupe, y por medio de esta profunda creencia de todo el pueblo, todos podemos hacer una tregua de paz, todos podemos dejar la comunicación hostil y dejar también las armas por un día y que a partir de ese día veamos cómo podemos empezar a vivir la paz en nuestro país”. La Conferencia del Episcopado Mexicano (CEM) se unió al llamado de tregua de la Arquidiócesis Primada de México y pidió la intercesión de la Virgen de Guadalupe y del Niño Jesús por las numerosas víctimas de la violencia en México, incluyendo a las familias que buscan a sus familiares desaparecidos, a los migrantes y a “aquellos que viven en situación de vulnerabilidad”. La violencia ha golpeado cada vez más a la Iglesia católica. México, por su parte, sigue siendo uno de los países con más asesinatos de clérigos católicos. Al menos 10 sacerdotes fueron asesinados durante la presidencia de 2018 a 2024 de López Obrador, según un informe del Centro Católico Multimedial, que rastrea la violencia contra la iglesia.

Tome Nota

Vírgenes y Santos

Natividad del Señor.
Diciembre 25

Sagrada Familia de Jesús, María y José.
Diciembre 29

San Silvestre.
Diciembre 31

Solemnidad de Santa María, madre de dios.
Enero 1

Epifanía del Señor.
Enero 5

Bautismo del Señor.
Enero 12

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El Papa dice que el documento final del Sínodo es parte del magisterio y debe ser aceptado

By Justin McLellan
CIUDAD DEL VATICANO (CNS) – Reafirmando la centralidad de la sinodalidad en la Iglesia católica, el Papa Francisco dijo que ahora corresponde a las iglesias locales aceptar y aplicar las propuestas del documento final aprobado por el Sínodo de los Obispos sobre la sinodalidad.

Aprobado por el Papa, el documento final del sínodo “forma parte del magisterio ordinario del sucesor de Pedro y, como tal, pido que sea aceptado”, escribió el pontífice en una nota publicada por el Vaticano el 25 de noviembre.

“Las Iglesias locales y las agrupaciones de iglesias están llamadas ahora a poner en práctica, en sus diferentes contextos, las autorizadas indicaciones contenidas en el documento, a través de los procesos de discernimiento y de decisión previstos por el derecho y el propio documento”, escribió el Santo Padre casi un mes después de la clausura del sínodo.

El documento final esbozaba las prioridades clave para la Iglesia, entre ellas una mayor participación de los laicos a través de nuevos ministerios y estructuras de gobierno ajustadas, una mayor transparencia y responsabilidad entre los dirigentes de la Iglesia y la creación de un espacio para grupos anteriormente marginados.

El Papa Francisco se dirige a los miembros del Sínodo de los Obispos sobre la sinodalidad después de que aprobaran su documento final el 26 de octubre de 2024, en el Aula de Audiencias Pablo VI del Vaticano. (Foto CNS/Vatican Media)

Después de que los miembros del sínodo votaran para aprobar el documento final, el Papa Francisco anunció que no escribiría la exhortación apostólica que se suele publicar después del sínodo, sino que ofrecería el documento a toda la Iglesia para su aplicación.

Con la excepción de los primeros sínodos convocados por San Pablo VI en 1967 y 1971, todas las asambleas ordinarias del Sínodo de los Obispos han ido seguidas de una exhortación sobre los temas del sínodo y los mensajes del Papa.

En su nota, el Papa Francisco aclaró que, aunque el documento “no es estrictamente normativo” y debe adaptarse a los contextos en los que se aplica, sigue comprometiendo “a las iglesias locales a tomar decisiones coherentes con lo que en él se indica”.

También subrayó la necesidad de tiempo para poder abordar cuestiones más amplias de toda la Iglesia, como las asignadas a los 10 grupos de estudio que creó en primavera para explorar cuestiones planteadas durante el sínodo, como el ministerio de la mujer, la educación en los seminarios, las relaciones entre los obispos y las comunidades religiosas, y el papel de los nuncios. Es posible que se creen más grupos, dijo el Papa.

La conclusión de la asamblea general del Sínodo de los Obispos “no pone fin al proceso sinodal”, escribió.
Añadió que el documento final del sínodo contiene recomendaciones que “ya pueden ponerse en práctica en las iglesias locales y en las agrupaciones de iglesias, teniendo en cuenta los diferentes contextos, de lo que ya se ha hecho y de lo que queda por hacer para aprender y desarrollar cada vez mejor el estilo propio de la Iglesia sinodal misionera”.

Breves de la Nación y el Mundo

NACIÓN
WASHINGTON (OSV News) – Mientras los activistas presionan al Presidente Joe Biden para que conmute las sentencias federales de muerte existentes durante sus últimos meses en el cargo, un nuevo informe del Centro de Información sobre la Pena de Muerte examina lo que denomina disparidades raciales persistentes en los procesos federales de pena de muerte. El informe llega en un momento en que los activistas contra la pena de muerte, incluida la Catholic Mobilizing Network (CMN), han argumentado que Biden, que fue el primer presidente de EE.UU. en hacer campaña para poner fin al uso de la pena de muerte federal, no ha cumplido esa promesa. CMN está animando a Biden a cumplir esa promesa con acciones concretas en el período postelectoral antes de que el presidente electo Donald Trump, que ha tratado de ampliar el uso de la pena capital, regrese a la Casa Blanca. El informe del centro de información, con sede en Washington, criticó los argumentos de los defensores de la pena capital de que la práctica federal es un “estándar de oro” con “la representación legal de la más alta calidad para los acusados de un conjunto reducido de delitos excepcionales”, lo que lleva a un proceso más fuerte que sus equivalentes a nivel estatal. En cambio, según el informe, la práctica a nivel federal tiene los mismos problemas sistémicos que los sistemas estatales de pena de muerte, “incluida la arbitrariedad, la representación legal ineficaz y, especialmente, el sesgo racial”. Robin M. Maher, director ejecutivo del centro, dijo: “Esperamos que los funcionarios electos consideren seriamente este estudio en profundidad del uso histórico de la pena capital y su uso actual antes de tomar alguna decisión a futuro”.

VATICANO
CIUDAD DEL VATICANO (CNS) – No hay cristianos de segunda clase, dijo el Papa Francisco. Los laicos, incluidas las mujeres, y el clero tienen dones especiales para edificar la Iglesia en unidad y santidad.”Los laicos no son los últimos, los laicos no son una especie de colaboradores externos o tropas auxiliares del clero, sino que tienen sus propios carismas y dones con los que contribuir a la misión de la Iglesia”, dijo el Papa el 20 de noviembre en su audiencia general en la Plaza de San Pedro. Continuando con una serie de catequesis sobre el papel del Espíritu Santo en la vida de la Iglesia, el Papa Francisco analizó cómo el Espíritu Santo edifica el Cuerpo de Cristo a través de la efusión de dones y carismas. El Espíritu Santo distribuye gracias especiales entre los fieles de todo rango. Por medio de estos dones, Él los hace aptos y preparados para asumir las diversas tareas y oficios que contribuyen a la renovación y edificación de la Iglesia, dijo, citando la Constitución Dogmática sobre la Iglesia del Concilio Vaticano II, “Lumen Gentium”. Un carisma es “el don concedido ‘para el bien común’. En otras palabras, no está destinado principal y ordinariamente a la santificación de la persona, sino al servicio de la comunidad”, dijo el Papa Francisco. “Se trata, en cambio, de dones ordinarios, cada uno de nosotros tiene su propio carisma, que adquieren un valor extraordinario cuando son inspirados por el Espíritu Santo y encarnados en las situaciones de la vida con amor”, dijo.

Una réplica de la estatua de la Virgen de París es transportada durante una procesión mariana con velas por las calles de París el 15 de noviembre de 2024, ya que la original, por motivos de seguridad, fue transportada en un camión de vuelta a la catedral de Notre Dame. La estatua permaneció cinco años en la iglesia de Saint-Germain-l’Auxerrois, cerca del Louvre, desde que Notre Dame fue arrasada por un incendio en 2019. (Foto OSV News/Stephanie Lecocq, Reuters)

MUNDO
PARÍS (OSV News) – Tras haber evitado milagrosamente las que cayeron del techo durante el incendio del 15 de abril de 2019, y después de esperar cinco años para volver a la catedral de Notre Dame, la estatua del siglo XIV de la Virgen de París regresó a casa el 15 de noviembre, acompañada por miles de parisinos que iban rezando, cantando y encendiendo velas mientras caminaban a su Virgen a la iglesia más icónica de París, restaurada después del incendio. Desde el incendio, la estatua, también llamada Virgen con el Niño o Virgen del Pilar, se encuentra cerca del Louvre, en la iglesia de Saint-Germain l’Auxerrois, desde donde partió la procesión a las 6 p.m. hora local. Por razones de seguridad, no fue posible transportar a pie la estatua real de la Virgen. En su lugar, todos pudieron presenciar su salida en camión, antes de partir, con velas y cantos, detrás de una réplica, iluminada y adornada con flores blancas. La procesión recorrió las orillas del Sena en dirección a la Île de la Cité, una de las dos islas parisinas y sede de la catedral de Notre Dame. Al llegar ante la catedral, hacia las 7 p.m., los peregrinos fueron recibidos por los cantos de la Maîtrise Notre Dame, el coro de la catedral. El arzobispo bendijo la estatua original, cuyo cajón se había abierto para que pudiera verse. A continuación, el camión entró en las obras de la cathedral para poder instalar la estatua original.