RIPLEY – Sábado 21 de septiembre 14º aniversario de la dedicación de la Iglesia de San Mateo. 10 a.m. – 5 p.m. Fiesta de San Mateo con puestos de comida, juegos y actividades. Si desea organizar un puesto de comida o participar de cualquier otra manera, comuníquese con Laura Ramírez/Padilla (662-587-3892 en español) o Katie Kerr (412-452-6643 en inglés)
Domingo 22 de septiembre 14º aniversario de la dedicación de la Iglesia de San Mateo. 1:30 p.m. Misa bilingüe con entronización de la estatua de San Mateo. Seguido de compartir una comida sencilla.
Por Maria Wiering INDIANÁPOLIS (OSV News) – Al final de la Misa de clausura del Congreso Eucarístico Nacional, el obispo Andrew H. Cozzens de Crookston, Minnesota, preguntó a la multitud de 60.000 personas reunidas en el estadio Lucas Oil el 21 de julio si tomarían su amor por la Eucaristía y la Iglesia, fortalecido durante los cinco días del congreso, e identificarían a una persona en su vida para evangelizarla intencionalmente. “Hermanos y hermanas, creemos que Dios desea renovar su Iglesia y que esta renovación se producirá a través de ustedes. Y entonces, al renovar su Iglesia, renovará el mundo”, dijo el obispo Cozzens, presidente de la junta del Congreso Eucarístico Nacional, Inc. “Lo que han recibido como regalo, deben darlo como regalo”, dijo. “Este año los hemos invitado a ‘caminar’ con una persona. ¿Qué pasaría si cada uno de ustedes pensara en una persona que conoce y que actualmente está alejada de la fe; y decidiera rezar por ella y entablar amistad y luego invitarla a dar un paso más cerca de Jesús y de su Iglesia?”.
“¿Qué pasaría si 70 millones de católicos hicieran eso?”, preguntó, refiriéndose al número estimado de católicos en Estados Unidos. “Y entonces mi pregunta es: ¿Lo harás? ¿Lo harás?”. La multitud aplaudió. El obispo Cozzens les remitió a la iniciativa de los obispos estadounidenses Camina con Alguien, lanzada con el congreso, que proporciona recursos para ayudar a los católicos a participar en el “compañerismo espiritual” y evangelizar eficazmente a través de sus relaciones existentes. La iniciativa es un componente clave del Año de la Misión, el tercer y último año del Avivamiento Eucarístico Nacional de los obispos estadounidenses, que comenzó en 2022 e incluyó el congreso del 17 al 21 de julio y la Peregrinación Eucarística Nacional que empezó en mayo. De pie detrás del escenario después de la Misa final del congreso, el obispo Cozzens dijo a OSV News que la Misa de clausura “fue la comisión, y realmente invitando a la gente a ser enviada para asumir el año misionero del avivamiento eucarístico”. Mons. Cozzens dijo que tuvo la sensación de que después del congreso, los asistentes estaban listos para evangelizar. “Les pregunté si estaban dispuestos a ‘caminar con alguien’, y me dijeron que sí”, dijo. Ese día, después de la Misa, Norma Williamson y Pearl Nelson, miembros de la parroquia de San Fabián en Hattiesburg, Mississippi, dijeron que hablaron durante el almuerzo con dos de sus compañeros que participaron en el congreso sobre lo que significaría para ellas “caminar con alguien”. Nelson dijo que pensaba ponerse en contacto con un miembro de su familia que ya no practica la fe católica y compartir algo de lo que aprendió en el congreso. Williamson esperaba despertar el interés y entusiasmo por la Eucaristía y la evangelización en su parroquia organizando grupos para ver las dinámicas charlas del congreso. Nelson dijo que se tomó muy en serio lo que la hermana de la Vida Bethany Madonna dijo mientras hablaba en el estadio “Lucas Oil” la primera noche del congreso, “que no hay que lanzarse y decir: ‘Quiero que vengas a la iglesia conmigo’, sino que hay que invitarles a comer, a tomar el té o a lo que sea, y tener una conversación informal, quizá para conocer mejor a la persona, para obtener algunas ideas”. Nelson también se preguntaba si utilizar música de alabanza y adoración en eventos parroquiales orientados a los jóvenes atraería a sus miembros más jóvenes. Ella y Williamson se quedaron asombradas cuando vieron a jóvenes y jóvenes adultos correr hacia el escenario, agitando las manos al ritmo de la música de alabanza la noche del viernes y sábado en el congreso. Nunca habían visto nada parecido en la Iglesia Católica. “Estaban tan entusiasmados”, dijo Nelson. “Me sentí muy bien. … Que se sintieran cómodos corriendo hacia el frente del escenario y adorando; fue una revelación”. Derrek Nguyen, de 16 años, fue uno de los 5.000 participantes menores de 18 años. Asistió con su grupo de jóvenes de la parroquia de Nuestra Señora del Perpetuo Socorro de Kearns, Utah, que sirve especialmente a católicos vietnamitas de Salt Lake City. Las conversaciones informales sobre la Eucaristía y la Iglesia Católica que mantuvo con otros asistentes, le instaron a apropiarse de su propia fe y expresar su entusiasmo a los miembros más jóvenes de su parroquia, a los que ayuda a catequizar. Nguyen dijo que no quiere que piensen que los sacramentos o su formación en la fe “son rutina”. “Es más que una clase”, dijo. “Esto es real. Esto es de dónde vienes. Esto es lo que eres”. Antes de una de las sesiones de impacto del congreso, Esmeralda Sánchez, de la Diócesis de Dallas, Texas, dijo a OSV News que este congreso eucarístico era una llamada a invitar a las personas que conocemos a regresar a casa. “Después de la pandemia hubo mucha gente que ya no regresó y yo te digo, ‘ven, ven, el Señor te está esperando, el Señor sana en la Santa Eucaristía, el Señor te dice que te ama”, dijo. “Y siempre él está como ese padre que siempre espera a ese hijo pródigo regresar a casa”. Para Sean Strasma (34), encargado del ministerio de jóvenes en Georgia, la evangelización formaba parte de su experiencia trabajando como operador gráfico en el equipo de producción del congreso. Los organizadores del Congreso contrataron a “lo mejor de lo mejor” para realizar los gráficos, la iluminación y el sonido de todo el evento, afirmó. Pero de los más de 80 miembros del equipo de producción, muy pocos eran católicos, dijo. Muchos eran protestantes evangélicos y estaban acostumbrados a trabajar en eventos sin religiones específicas. “Tenían montones de preguntas sobre la Eucaristía y qué era la adoración, y sobre aspectos litúrgicos, lo que fue muy interesante”, dijo Strasma, quien antes de ingresar a la Iglesia Católica, siendo adulto, era evangélico pentecostal. “Sólo explicarles que si aceptas la premisa de que la Eucaristía es el cuerpo, la sangre, el alma y la divinidad de nuestro Señor y Salvador Jesucristo, de ahí fluye gran parte de nuestra teología sobre los aspectos litúrgicos”.
Dijo que una de las cosas que aprendió fue a reconsiderar su forma de abordar la fe católica con los miembros protestantes de su familia. Strasma también esperaba que el congreso demostrara a los padres el valor de las conferencias juveniles para sus hijos adolescentes, porque, mientras que muchos de los jóvenes asistentes probablemente han estado en SEEK, NCYC o en una Conferencia de Steubenville, “muchos de los adultos, nunca han tenido una experiencia como esta, y fue realmente genial verles participar en una conferencia como esta por primera vez”. Graciela Vargas y su esposo el diácono Miguel Vargas, feligreses del Santuario de Nuestra Señora de Guadalupe en Des Plaines, Illinois, dijeron que el momento que el Santísimo se hizo presente en las noches de avivamiento en Lucas Oil, rodeados de tanta gente, fue “un momento indescriptible”. “Jesús está vivo, está con nosotros, nos lo demuestra de mil maneras, pero está esperando por nuestra respuesta”, dijo Miguel Vargas. “La esperanza de la Iglesia es la Eucaristía, y queremos llevarnos esa esperanza con nosotros para compartirla con nuestra familia, en donde quiera que estemos”.
Por Rhonda Swita TUPELO – El 20 de julio de 2024, el Dr. Hosffman Ospino, reconocido profesor de teología de Boston College, habló en la iglesia St. James de Tupelo. St. James tiene la bendición de contar con una comunidad diversa de creyentes. El mensaje del Dr. Ospino fue de unidad y esperanza, centrándose en que somos una comunidad de muchas familias, una iglesia y una fe.
El Dr. Ospino nos dio una lección de historia sobre la evolución del catolicismo durante los primeros tiempos de la vida estadounidense, aunque teniendo en cuenta que los católicos estaban presentes en el país desde el siglo XVI. A principios del siglo XIX sólo había un obispo y unas 400 iglesias. Pero en los 150 años siguientes llegaron muchos grupos numerosos de diversas nacionalidades, que trajeron su propia mano de obra y sacerdotes. Como resultado, se construyeron unas 20.000 iglesias. Pronto se construyeron 13.000 escuelas católicas, más de 300 universidades católicas y muchos hospitales y organizaciones de servicios sociales. Cada nacionalidad se mantuvo prácticamente aislada, construyendo comunidades en su propia lengua y evitando mezclarse entre grupos para preservar su identidad.
Sin embargo, a medida que las generaciones mayores iban falleciendo, las más nuevas adoptaban el inglés y la gente pasaba a formar parte del “crisol” de la cultura americana. La gente tenía trabajo y los niños se educaban en la fe católica. Las familias católicas eran fuertes en su fe católica. En 1950 había unos 30 millones de católicos en los Estados Unidos.
Durante las décadas de 1950 y 1960, importantes cambios sociales alejaron a un número significativo de católicos de las formas tradicionales de ser Iglesia. La inmigración procedente de Europa se había reducido y diversas revoluciones culturales, como el movimiento por los derechos de la mujer, las nuevas actitudes hacia la sexualidad y el Movimiento por los Derechos Civiles, redefinieron la vida católica en los Estados Unidos. Actitudes más desafortunadas, como la creciente apertura a tratar el derecho a “ terminar “ con la vida en el vientre materno como un derecho, se afianzaron en nuestra sociedad. Muchos católicos dejaron de practicar su fe. Esta tendencia se agravó a principios de la década de 2000 con los efectos del escándalo de los abusos sexuales a menores por parte del clero. La asistencia a misa disminuyó y miles de iglesias y escuelas católicas cerraron.
Aunque se podría pensar que el catolicismo americano está en declive, en realidad es todo lo contrario. Los nuevos católicos inmigrantes, principalmente de América Latina, el Caribe, Asia y África, y sus hijos nacidos en los Estados Unidos, están dando nueva vida a nuestras comunidades católicas. Buscan comunidades católicas para alimentar su fe. Esas comunidades ya existen. Debemos aprovechar las lecciones de nuestro pasado y adoptar formas más novedosas de evangelizar en medio de la diversidad que conforma el catolicismo americano para construir el reino de Dios en nuestras parroquias.
El Dr. Ospino nos dio algunas ideas sobre cómo hacerlo. 1) Debemos educar a los padres – enseñarles primero, para que ellos puedan enseñar a sus hijos. 2) Considerar iniciativas familiares de formación en la fe. 3) Darnos cuenta de que ser multicultural es un don de Dios. Aceptémoslo. Eso es lo que somos. 4) Reconocer que la comunicación bilingüe está bien. Los padres hablan a sus hijos de diferentes maneras. 5) Todos nuestros esfuerzos pastorales deben conducir a construir comunión: con Dios, con nuestra iglesia, entre nosotros. 6) Practicar Misa, Mesa y Musa. Misa es una invitación a rezar juntos. Mesa es una llamada a comer juntos. No hay nada más sanador que comer juntos. Musa es una llamada a celebrar juntos con espíritu de fiesta. 7) Estar atentos a lo que funciona bien con los católicos hispanos y otros grupos. Estar abiertos a aprender cómo ser Iglesia desde las comunidades que renuevan el catolicismo americano.
El mensaje del Dr. Ospino puede resumirse así: La diversidad no es un problema. Es un don. Nuestra prioridad es facilitar el encuentro con Cristo. Evangelizar y edificar el reino de Dios, ¡y hacerlo con alegría!
(Rhonda Swita es la Directora de Formación en la Fe de la parroquia de St. James en Tupelo).
Por Obispo Joseph R. Kopacz, D.D. A medida que entramos en el mes de agosto, las olas de un nuevo año de ministerio en toda la diócesis llegan a las costas de nuestras escuelas, parroquias, y servicios sociales. No todos los programas y servicios comienzan al mismo tiempo, pero a mediados de septiembre todos están en marea alta. Nuestras Escuelas Católicas están funcionando a toda capacidad desde la primera semana de agosto, en sintonía con nuestros cuatro Centros de Aprendizaje Temprano que funcionas durante 12 meses. Caridades Católicas no cierra sus puertas en ningún momento del año, un nuevo año escolar requiere una mayor participación de los programas que sirven a los niños y jóvenes. Del mismo modo, las luces de nuestras iglesias continúan ardiendo intensamente durante 52 semanas, pero con el inicio del otoño, los ministerios parroquiales están en pleno apogeo.
Desde la Cátedra del obispo en el centro de la diócesis, es cautivador echar una mirada larga y amorosa a la red diocesana que tiene tantos niveles e influencias. A principios de este mes tuve el privilegio de hacer una llamada misionera a la diócesis de Keene, New Hampshire. Por supuesto, dondequiera en cualquier momento y lugar que se lleve a cabo una apelación, las Escrituras siempre guían el camino.
El decimonoveno Domingo del Tiempo Ordinario, del 10 y 11 de agosto, el Discurso del Pan de Vida en el capítulo 6 del Evangelio de San Juan estaba llegando a su punto culminante. “Yo soy el pan de vida… Yo soy el pan vivo que bajó del cielo. el que coma de este pan vivirá para siempre; y el pan que yo daré es mi carne para la vida del mundo”. (Juan 6:48-51)
Las palabras del Señor resonaron a lo grande ese fin de semana, no solo en New Hampshire y Mississippi, sino en todas partes del mundo donde se reunió la Iglesia Católica. En otras palabras, en el corazón del discurso de Jesús está la Eucaristía, donde consumimos su cuerpo y su sangre, así como sus palabras. Celebramos nuestra unidad e identidad, porque somos una sola Iglesia santa, católica y apostólica; (Credo de Nicea) hay una sola fe, un solo Señor, un solo bautismo, un solo Dios que es Padre de todos y habita en todos. (Efesios 4:4-5)
Sin embargo, de esta unidad fluye una diversidad asombrosa. La iglesia y el evangelio están implantados en un lugar, tiempo y cultura particulares, tan solo en nuestro país hay diferencias significativas en cada región, de hecho, en cada uno de nuestros estados. En cuanto al llamamiento misionero, es un gozo para mí presumir de la Diócesis de Jackson durante más de 10 años he hablado en parroquias católicas desde Wisconsin hasta Florida, New Hampshire y California.
El estudio de CARA realizado durante nuestro proceso de Re-Imaginación Pastoral confirmó que los católicos en la Diócesis de Jackson representan el 2-3% de la población del estado. La demografía, así como la geografía, la historia, el clima, la educación y muchos otros factores se unen para crear las condiciones para la evangelización y una gran cantidad de ministerios. Aquellos que realmente aman al Señor y se preocupan por ver a la iglesia prosperar están ansiosos por aprender de la Diócesis de Jackson, de sus logros y desafíos como Iglesia Católica en Mississippi. Muchos nunca han vivido, viajado o visitado el estado de Magnolia, pero después de una misa hace dos semanas, un caballero me informó que había nacido en la ciudad de Yazoo. Por lo general, nuestras hermanas y hermanos en la fe responden generosamente cuando escuchan cómo sus contribuciones ayudarán a los ministerios parroquiales, escolares y ministerios de servicio.
En esta época del año, especialmente con el desarrollo de tantos ministerios y actividades, es especialmente gratificante compartir nuestra historia de fe durante la Misa, nuestra gran oración de acción de gracias. “En San Pablo, confiemos en que, si dios empezó tan buen trabajo en ustedes, estoy seguro de que lo continuara hasta concluirlo el día de Cristo Jesús”. (Filipenses 1:6)
By Cindy Wooden CIUDAD DEL VATICANO (CNS) – Cada cristiano y toda la Iglesia Católica deben aferrarse a la promesa de que “nada es imposible para Dios”, especialmente cuando se enfrentan a dificultades, dijo el Papa Francisco.
Reanudando sus audiencias semanales el 7 de agosto después de una pausa de verano de seis semanas, el Papa retomó su serie de discursos en audiencia sobre el papel del Espíritu Santo en la vida de la Iglesia. “Sin el Espíritu Santo la Iglesia no puede avanzar, la Iglesia no crece, la Iglesia no puede predicar”, dijo a los peregrinos y visitantes que se resguardaban del calor del verano en la Sala de Audiencias Pablo VI, con aire acondicionado.
Dos mujeres que portaban pancartas y pedían a gritos que la Iglesia declarara formalmente que las corridas de toros son pecado interrumpieron la lectura de un pasaje de la Biblia al comienzo de la audiencia. La seguridad las escoltó fuera de la sala de audiencias.
Observando cómo el Espíritu Santo vivifica y asiste a la Iglesia, el Papa Francisco dijo que la gente a menudo se pregunta: “¿Cómo es posible anunciar a Jesucristo y su salvación a un mundo que parece buscar solo el bienestar?”
La respuesta, dijo, se da en los Hechos de los Apóstoles: “Recibiréis la fuerza del Espíritu Santo, que vendrá sobre vosotros, y seréis mis testigos”.
Fíjense, dijo el Papa, las palabras son casi las mismas que el ángel Gabriel dijo a María cuando ella preguntó cómo sería posible que concibiera y diera a luz al hijo de Dios.
“Lo que se dice de la Iglesia en general, vale también para nosotros, para cada bautizado”, dijo el Papa Francisco a la multitud. “Cada uno de nosotros se encuentra a veces, en la vida, en situaciones superiores a sus fuerzas y se pregunta: ‘¿Cómo puedo afrontar esta situación?’. Ayuda, en estos casos, repetirse a uno mismo lo que el ángel dijo a la Virgen: ‘Para Dios nada será imposible’”.
El Papa rezó para que todos encuentren la fuerza para seguir adelante “con esta reconfortante certeza en el corazón: ‘Nada es imposible para Dios’”.
“Si creemos esto, haremos milagros”, dijo. “Nada es imposible para Dios”.
VATICANO CIUDAD DEL VATICANO (CNS) – A sólo dos meses de que el Sínodo de los Obispos se reúna de nuevo en Roma, sus miembros latinoamericanos se reunieron para debatir cómo se puede implementar la sinodalidad en la Iglesia católica tras la clausura de la asamblea en octubre. En la sede del Consejo Episcopal Latinoamericano, conocido como CELAM, en Bogotá, Colombia, 42 miembros latinoamericanos de la asamblea sinodal -19 obispos, cinco sacerdotes, siete religiosas y 11 laicos- discutieron cómo la asamblea puede impulsar a la Iglesia a incorporar la sinodalidad en sus prácticas y cultura después de que termine el actual sínodo. El obispo Luis Marín de San Martín, subsecretario del Sínodo, abrió la reunión del 12 al 14 de agosto explicando que el objetivo del actual Sínodo es «fortalecer, desarrollar y concretar la sinodalidad en la Iglesia», informó la agencia de noticias del CELAM, ADN. El obispo afirmó la necesidad de pensar en la fase postsinodal del proceso, que incluye la necesidad de fortalecer la unidad de la Iglesia y dejar de lado los temores sobre la pluralidad en la Iglesia. El padre jesuita Giacomo Costa, secretario especial del sínodo, dijo que mientras la primera asamblea del sínodo consistió en encontrar áreas de convergencia y establecer un diálogo entre los miembros, la próxima asamblea debe centrarse en pensar «direcciones o pasos concretos para crecer como iglesia misionera».
CIUDAD DEL VATICANO (CNS) – El Vaticano confirmó el 9 de agosto que siete sacerdotes expulsados de Nicaragua llegaron a Roma el 8 de agosto. Ellos habían sido detenidos en un asalto a una diócesis dirigida por un obispo en el exilio, mientras el régimen de Ortega continuaba debilitando a la Iglesia Católica y forzando a sus críticos al exilio. Los siete sacerdotes salieron del país el 7 de agosto y llegaron a Roma la noche siguiente, donde fueron recibidos por funcionarios del Vaticano, según un comunicado del gobierno nicaragüense del 8 de agosto. Fueron detenidos en una oleada de arrestos, la mayoría de ellos en la diócesis de Matagalpa, donde el exiliado obispo Rolando Álvarez sigue siendo el líder eclesiástico. El comunicado del gobierno no nombraba a los sacerdotes exiliados, pero Vatican Media identificó a los eclesiásticos como monseñor Ulises René Vega, monseñor Edgar Sacasa, y los padres Jairo Pravia, Víctor Godoy, Marlon Velásquez, Harvin Torrez y Silvio José Romero. Sacerdotes nicaragüenses en el exilio y laicos católicos lamentan que los fieles nicaragüenses se queden sin pastores, sin poder asistir a misa. “ La Diócesis de Matagalpa prácticamente ya no tiene clero. Hemos sido expulsados, apresados y obligados a huir. Las parroquias están quedando solas”, dijo a OSV News un sacerdote exiliado, familiarizado con la diócesis. El Vaticano no dio informes sobre los secuestrados.
MUNDO PARIS (OSV News) – Entre los medallistas olímpicos estadounidenses que lograron un lugar en el podio en París hay católicos que han expresado su dependencia de la fe a lo largo de los años mientras buscaban la excelencia en sus actividades atléticas El 3 de agosto, Ledecky se convirtió en la medallista de oro estadounidense más condecorada en cualquier deporte, así como en una de las dos únicas mujeres de cualquier país, en cualquier deporte, que ha ganado nueve medallas de oro. Era su cuarta medalla de oro olímpica consecutiva en los 800 libres. Tiene 14 medallas en total. Después de los Juegos de Tokio 2021, la graduada de una escuela católica declaró al Catholic Standard, periódico de la Arquidiócesis de Washington, que rezaba el Ave María antes de cada carrera para calmar los nervios, al igual que había hecho durante las Olimpiadas de 2012 y 2016. Ledecky, de 27 años, tiene nueve medallas olímpicas de oro, cuatro de plata y una de bronce. En París es compañera de equipo de dos ex alumnas de su instituto femenino, el Stone Ridge School of the Sacred Heart de Bethesda, Maryland: Phoebe Bacon y Erin Gemmell. Gemmell fue medallista junto a Ledecky en el relevo de 4×200 metros. Ellas forman parte de un grupo de atletas olímpicos estadounidenses que son católicos, fueron educados en la fe o asistieron a escuelas o universidades católicas y ahora compiten en París. La gimnasta olímpica estadounidense y medallista de oro en París Simone Biles, criada en la fe católica, ha dicho que su éxito se debe a Dios y a su fe. Ryan Murphy, que también se crió en el catolicismo y ha hablado de su fe y su vida de oración, se lleva a casa la medalla de bronce en los 100 metros espalda masculinos.
Por David Agren CIUDAD DE MÉXICO (OSV News) – Las autoridades mexicanas rescataron recientemente a 13 migrantes secuestrados en una casa secreta de Ciudad Juárez, lugar donde “fueron golpeados, torturados, agredidos sexualmente y extorsionados por miembros de una organización criminal transnacional para que pagaran más por el contrabando”, según el Departamento de Seguridad Nacional de Estados Unidos. El rescate se produjo el 11 de junio – pero fue dado a conocer casi dos semanas más tarde – después de que agentes especiales de Homeland Security Investigations compartieran información con la policía del estado de Chihuahua y la Secretaría de la Defensa Nacional de México, que descubrieron a los migrantes en la zona de Anapra, en Ciudad Juárez, cerca de la frontera estadounidense con New Mexico y Texas. Seis sospechosos de entre 16 y 24 años fueron detenidos y acusados de delitos con armas de fuego, drogas, agresión sexual y secuestro agravado.
Una de las víctimas necesitó tres intervenciones quirúrgicas por la “tortura por quemaduras” que sufrió, según el periódico El Diario de Ciudad Juárez. Las víctimas – entre las que había ciudadanos de Guatemala y Honduras – “sufrieron contusiones por golpes, quemaduras, costillas rotas y marcas de ligaduras”, mientras que “algunas de las mujeres migrantes fueron agredidas sexualmente”, según el Departamento de Seguridad Nacional. Las autoridades mexicanas están investigando la muerte de dos migrantes posiblemente asesinados en la casa secreta para migrantes.
Las autoridades estadounidenses recibieron información sobre el escondite después de que dos migrantes cruzaran Santa Teresa, en New Mexico, el 8 de junio y se entregaran a los agentes de la Patrulla Fronteriza. Los migrantes denunciaron haber sido secuestrados, pero liberados tras el pago de rescates, y mostraron a los agentes quemaduras y heridas provocadas por palizas durante su cautiverio.
Enrique Rodríguez, jefe de información de la Fiscalía General del Estado de Chihuahua, le dijo a Univision Noticias que los secuestradores obligaron a los migrantes a grabar videos después de ser torturados “para presionar a sus familias a pagar por el monto de sus rescates”.
El rescate de este grupo de migrantes en Ciudad Juárez fue un duro recordatorio de los riesgos a los que se enfrentan los migrantes en su tránsito por México para intentar llegar a la frontera con Estados Unidos y del creciente control que ejercen los cárteles de la droga y los grupos delictivos sobre el flujo de migrantes.
También puso en evidencia la crueldad de los secuestros, en los que los grupos delictivos atacan a los migrantes, que se ven obligados a suplicar a sus familiares en sus países de origen o en Estados Unidos que paguen rescates por su liberación. Los inmigrantes secuestrados en Ciudad Juárez, que se encuentra frente a El Paso, Texas, pagan hasta 20.000 dólares por su liberación.
Frecuentemente, los secuestradores llaman a la familia “ después de una semana de tener a la persona secuestrada, para que las familias estén más ansiosas y propensas a pagar”, según un informe que publicarán próximamente el Hope Border Institute y Derechos Humanos Integrales en Acción, o DHIA, una organización de derechos humanos con sede en Ciudad Juárez. “En los casos en que las familias no pueden pagar o no pueden hacerlo a tiempo, hemos observado situaciones de tortura y violencia sexual. Si las familias pueden pagar, los cárteles suelen exigir un segundo pago antes de dejar al individuo cerca del muro fronterizo.”
Los migrantes también deben pagar a una de las tres organizaciones delictivas de Ciudad Juárez para cruzar la frontera estadounidense entre los puertos de entrada, proporcionando una palabra clave como prueba del pago. Esta extorsión se produce a veces “en una zona cercana a la frontera, bajo amenaza de lesiones corporales”, cerca de la Guardia Nacional de Texas, según el informe.
Los autores del informe revisaron los registros policiales que muestran aproximadamente 400 secuestros en Ciudad Juárez durante los primeros cinco meses de 2024. Sin embargo, afirmaron que la mayoría de los migrantes no denuncian los secuestros por temor a sufrir represalias.
Las conclusiones del Hope Border Institute-DHIA – que coinciden con los resultados de un proyecto de seguimiento de organizaciones como el Servicio Jesuita a Refugiados en Ciudad Juárez – reveló que el 50% de los migrantes en tránsito por Ciudad Juárez se encontraban en “condiciones extremadamente vulnerables”. Al menos el 60% de los que se encontraban en condiciones vulnerables habían sufrido violencia y el 53% “había sufrido violencia adicional en Ciudad Juárez tanto a manos de las autoridades como de elementos criminales”.
Para complicar las cosas, sugiere el informe, hay reportes de una presunta complicidad de algunos funcionarios mexicanos de inmigración y miembros de la Guardia Nacional en los secuestros. Muchos de los secuestros tienen lugar cerca del aeropuerto y la estación de autobuses de Ciudad Juárez, según el informe, y los funcionarios de inmigración “(alertan) a los miembros de los cárteles sobre la presencia de los migrantes para que puedan interceptarlos”.
Los católicos que trabajan con migrantes en otras partes de México han denunciado que los secuestros son rutinarios. En el estado de Tamaulipas, al noreste del país, la Diócesis de Matamoros informa de que un gran número de inmigrantes acuden a sus albergues tras ser liberados por sus captores.
“Bajo la presión de Estados Unidos, ha habido un aumento significativo en la actividad de aplicación de la ley por parte de México para reducir la migración a la frontera entre Estados Unidos y México”, dijo Dylan Corbett, director del Hope Border Institute, a OSV News.
“Hemos visto que cada vez que hay una represión de la migración por parte del gobierno mexicano, coincide con un aumento de la vulnerabilidad de los migrantes a los actores corruptos”, dijo. “Lo que estamos presenciando ahora es un cóctel mortal que incluye todos esos elementos, convirtiendo la vida de demasiados migrantes que viajan a través de México en una verdadera pesadilla”.
Por Terry Dickson BILOXI (OSV News) – Los peregrinos de la Ruta de San Juan Diego de la Peregrinación Eucarística Nacional dejaron la costa del Golfo de Mississippi con un recuerdo especial – algo que se ha estado gestando por varios años.
Tammy DiLorenzo, directora de la Oficina de Finanzas de la Diócesis de Biloxi, es también una artista consumada que crea hermosos rosarios en su tiempo libre. Para conmemorar la Peregrinación Eucarística Nacional, DiLorenzo creó un rosario especial, que contiene imágenes de los vitrales de cinco de las iglesias que fueron paradas en la Diócesis de Biloxi en la Ruta de San Juan Diego.
Las vidrieras representadas en este rosario siguen la vida de Jesús. Incluyen el vitral de la Anunciación dentro de Our Lady of the Gulf Church en Bay St. Louis; la ventana de la Crucifixión dentro de la Capilla de San Pablo en Pass Christian; el vitral de la Natividad de Nuestro Señor dentro de la iglesia de St. Thomas the Apostle en Long Beach; la ventana de la Resurrección dentro de la Iglesia St. James en Gulfport; y la ventana de las Bodas de Caná dentro de la catedral Nativity of the Blessed Virgin Mary en Biloxi.
En la parte posterior de la medalla central hay un botón que contiene arena de la playa de Long Beach, que representa la Bendición inaugural del Mar, que tuvo lugar el 12 de junio cuando la peregrinación pasó por la diócesis.
DiLorenzo, feligresa de la parroquia St. Thomas the Apostle en Long Beach, ha sido creativa toda su vida, pero sólo se ha dedicado más activamente al arte y a las manualidades durante los últimos 12 años, después de que sus hijos estaban al final de su adolecencia y sus 20’s. Ella dijo que la idea de utilizar imágenes de vidrieras de la Iglesia de St. Thomas the Apostle surgió varios años después.
DiLorenzo sabía que quería hacer algo con esas imágenes, pero no estaba segura de qué, hasta que tuvo una revelación durante una noche de insomnio. Por la mañana, la idea de utilizar las imágenes para crear una medalla central y las cuatro cuentas del Padre Nuestro se había solidificado. Luego fue cuestión de convertir esos pensamientos en realidad.
Luego, poco después de que la pandemia de Covid-19 había disminuido, DiLorenzo estaba trabajando como voluntaria en la conferencia juvenil diocesana y estaba armando un rosario usando las imágenes de la ventana de la catedral para un compañero de trabajo jubilado cuando Bunny Thompson, una feligrés de la parroquia Our Mother of Sorrows, una histórica parroquia afroamericana en East Biloxi, se acercó a ella.
“Ella me vio trabajando (en el rosario) y me preguntó qué estaba haciendo. Le expliqué que hago estos rosarios de vez en cuando. … Entonces, me preguntó si podía tomar fotografías de las ventanas del interior de Our Mother of Sorrows Church y Blessed Francis Xavier Seelos Church, justo al final de la calle”, dijo DiLorenzo.
“Así lo hice, y casi al mismo tiempo, la escuela St. Vincent de Paul volvía a celebrar su evento anual para recaudar fondos y me propusieron de nuevo hacer una donación para una subasta silenciosa. Decidí hacer otro rosario usando las imágenes de las vidrieras de Santo Tomás. Sin embargo, dado que la mayoría de los niños de esa escuela asistían a la Iglesia Holy Family en Pass Christian, también le pregunté al padre Mike Austin, pastor de Holy Family, si podía hacer un rosario usando las ventanas de su iglesia y estuvo de acuerdo”.
Al padre Austin le gustó tanto el rosario que hizo DiLorenzo que le pidió que considerara hacer rosarios adicionales para venderlos a sus feligreses.
“Originalmente no me propuse vender estos rosarios, pero cuanto más lo pensaba, más fuerte me sentía acerca de ponerlos a disposición de los feligreses”, dijo.
“Estos (rosarios) son muy personales para la gente. La gente ama a sus parroquias.
Ese es nuestro hogar. Ahí es donde celebramos todos los sacramentos. Ahí es donde vamos a Misa todas las semanas. Ahí es donde bautizamos a nuestro pueblo. Ahí es donde enterramos a nuestra gente. Ahí es donde tenemos bodas. Son tantas las cosas que suceden en nuestras iglesias parroquiales. Estamos muy apegadas a ellas. Entonces decidí hacerlo”.
Los rosarios se hicieron aún más populares después de que DiLorenzo publicara fotografías de los rosarios de las iglesias St. Thomas y Holy Family en su página de Facebook.
“Diferentes personas se acercaron a mí y me dijeron: ‘Bueno, mi parroquia también tiene ventanas bonitas’. ¿Pensarías en venir y hacer eso en mi parroquia?’”, recordó. “Entonces, lo he hecho en varias parroquias de la Diócesis de Biloxi, así como en parroquias de fuera del estado”.
Por lo general, se necesita un poco más de una hora para crear cada rosario, pero ha contado con la ayuda de varios miembros de su familia cuando la ha necesitado.
“Ha sido una gran bendición para mí”, dijo DiLorenzo. “Terminé convirtiendo una de las habitaciones de mi casa en un estudio de arte y ahí es donde trabajo por las tardes y los fines de semana. … Es un momento de meditación para mí”.
“Cuando creo estos rosarios, rezo por las personas que van a recibirlos. Sé que ver la belleza de una iglesia y poder convertir esa belleza en un rosario es un don que se me ha concedido. El rosario es una hermosa tradición de oraciones en nuestra fe católica y me encanta poder compartir la belleza que veo”.
DiLorenzo se sintió honrada de poder crear los Rosarios de Peregrinación y compartirlos con los peregrinos que pasan por la Costa del Golfo de Mississippi durante la Ruta de San Juan Diego de la Peregrinación Eucarística Nacional.
“Cuando me di cuenta de que visitarían cinco iglesias, pensé que sería perfecto armar un rosario para conmemorar la peregrinación”, dijo.
Debido a que los miembros del equipo de peregrinación solicitaron el rosario de la peregrinación para ellos mismos, DiLorenzo los está poniendo a la venta al público. Las ganancias se destinarán a la capilla de adoración de St. Thomas the Apostle Parish. Pueden adquirirse en fairee-designs.square.site o enviando un correo electrónico a faireedesigns@gmail.com.
Terry Dickson es editor del Gulf Pine Catholic, el periódico de la Diócesis de Biloxi.
INDIANÁPOLIS (OSV News) — Un silencio absoluto llenó el Lucas Oil Stadium cuando decenas de miles de personas se arrodillaron para adorar a Jesucristo Sacramentado en la tarde del 17 de julio en Indianápolis. Más de 100 focos apuntaron a una gran custodia dorada sobre un altar en el centro del estadio, mientras una poderosa hora santa — que tuvo lugar antes de las charlas, la música o el saludo de los tres presentadores de la velada — daba comienzo a la primera noche de avivamiento del congreso, llena de oración, poderosos oradores y música de alabanza y adoración.
Justo antes de que el obispo Andrew H. Cozzens de Crookston, Minnesota — la fuerza episcopal impulsora del congreso — entrara en la sala portando la custodia, los 30 peregrinos perpetuos que habían recorrido las cuatro rutas de la Peregrinación Eucarística Nacional entraron en el estadio. Portando íconos de los respectivos santos patronos de cada ruta — San Juan Diego Cuauhtlatoatzin, San Junípero Serra, Santa Elizabeth Ann Seton y la Santísima Virgen María — los peregrinos dieron los últimos pasos que completaron oficialmente su viaje de ocho semanas desde puntos del norte, sur, este y oeste de EE.UU. hasta el congreso del 17 al 21 de julio en la capital de Indiana.
Tras un tiempo de oración silenciosa y de alabanza y adoración, el obispo Cozzens se arrodilló por segunda vez ante la custodia.
“Señor, queríamos dedicarte las primeras palabras de nuestro Congreso Eucarístico Nacional”, dijo el arrodillado ante Jesús Eucaristía. Mons. Cozzens relató cómo el Avivamiento Eucarístico Nacional — iniciado en 2022 — ha llevado a los católicos a reunirse para estudiar, enseñar y rezar con la Eucaristía, pasando incontables horas en adoración y pequeños grupos, y participando en iniciativas parroquiales y diocesanas.
“Señor, hemos hecho una Peregrinación Eucarística Nacional para ti”, rezó. “Durante los últimos 65 días hemos llevado tu presencia viva por toda esta tierra, por el Este, el Oeste, el Norte y el Sur. Visitamos iglesias grandes y pequeñas. Hicimos grandes procesiones en ciudades y pequeñas procesiones en prisiones. Visitamos residencias de ancianos y refugios para personas sin hogar. Señor, intentamos compartir con todos los que encontramos por el camino tu increíble amor”.
El obispo dijo que la peregrinación rezó por el país y la Iglesia y llevó esas oraciones al congreso. Dio las gracias a Jesús por los milagros que los peregrinos vieron a lo largo del camino: conversiones, personas que volvían a la fe, curaciones físicas y espirituales.
“Esperamos ver más”, dijo.
Dijo a Jesús que las decenas de miles de católicos presentes en el estadio se habían reunido allí para darle gracias y alabarle y para convertirse en “discípulos misioneros, gente llena de la alegría del Evangelio, gente tan agradecida por la salvación por la que tu pagaste”.
Rezó por una conversión más profunda de las personas, por la paz en los países asolados por la guerra, por los afectados por los abusos y por la unidad tanto del país como de la Iglesia. El obispo Cozzens invitó a los asistentes a compartir en silencio sus propios deseos con Jesús, y luego les pidió que rezaran para que el Señor les revelara también sus deseos para ellos.
“Jesús, en ti confío”, rezó, y el estadio resonó mientras la gente se hacía eco de su oración.
“Señor, hemos venido aquí porque queremos un avivamiento, un avivamiento eucarístico, y queremos que cada católico se dé cuenta de que estás vivo en la Eucaristía, y que se encuentre con tu amor”, dijo. “Y Señor, sabemos que este avivamiento, tiene que comenzar con nosotros”.
Una vez concluida la hora santa y después de que el obispo Cozzens saliera en procesión con el Santísimo, subieron al escenario los animadores del avivamiento: El padre Joshua Johnson, director de vocaciones de la diócesis de Baton Rouge, Louisiana; Montse Alvarado, presidenta de EWTN News — quien saludó a los asistentes en español e inglés, instando a miles de católicos a dar vítores para Cristo Rey — y la hermana Miriam James Heidland, miembro de la Sociedad de Nuestra Señora de la Santísima Trinidad. Los tres hablaron de sus experiencias personales con la Eucaristía y de lo que el congreso significaba para ellos, antes de presentar a los demás ponentes de la tarde.
El cardenal Christophe Pierre, nuncio papal en Estados Unidos, fue el orador principal de la noche. Comenzó con la reflexión de que “quizá nuestra oración principal para este congreso eucarístico debería ser ésta: que nosotros, como Iglesia, podamos crecer en nuestra unidad para que seamos más fructíferos en nuestra misión…”.
Invitó a los presentes a reflexionar sobre “¿qué es el renacimiento eucarístico?” y “¿cómo sabremos que estamos experimentando un avivamiento eucarístico?”.
El avivamiento “siempre va acompañado de la devoción sacramental”, dijo, pero “debe extenderse también más allá de las prácticas devocionales”.
“Cuando estamos verdaderamente renovados por la Eucaristía”, dijo, “entonces nuestro encuentro con la presencia real de Cristo en el sacramento nos abre a un encuentro con Él en el resto de nuestra vida. Esto significa verlo dondequiera que vayamos”.
Le recordó a los reunidos que Cristo “también está presente en nuestros encuentros con las personas de las que, de otro modo, nos consideraríamos divididos”, incluidas “personas de una clase económica o raza diferente, personas que desafían nuestra forma de pensar”.
Vivir “una vida verdaderamente eucarística”, subrayó, significa que la adoración “se derrama en nuestra vida cotidiana, una vida de relación con los demás, nuestra manera de ver a los demás”.
El cardenal animó a los reunidos a aprovechar el tiempo de adoración durante la semana del Congreso Eucarístico para pedir al Señor que les revele los lugares en los que se resisten a entregarse a su voluntad.
“Él es el único que puede conducirnos a una vida nueva”, concluyó, “siguiéndole, podemos convertirnos en verdaderos apóstoles de su Reino”.
La hermana Bethany Madonna, superiora local de la nueva misión de Phoenix de las Hermanas de la Vida, quienes apoyan y acompañan a mujeres embarazadas, habló de cómo Jesús, crucificado y resucitado, “quiere revelarse” y traer su gracia por su amor a cada persona.
“Dios te conoce. Dios te ama. Y te elige… Te ha confiado una misión que no le ha confiado a nadie más”, dijo. Jesús “sabe que tenemos hambre de amor, y elige entregarse a nosotros como comida y bebida”.
“Tenemos esa sed insaciable de ser amados que nadie ni nada puede saciar”, salvo Dios, explicó. La hermana Bethany Madonna recordó que cuando el miedo o el fracaso pueden impedir acercarse al amor de Dios, “Jesús lo redime todo”.
Compartió el testimonio de una mujer a la que le aterrorizaba confesarse — cuando ella y su marido buscaban convalidar su matrimonio y participar en el sacramento de la reconciliación — y la raíz de su miedo eran dos abortos que sufrió cuando era más joven. Vivió en la vergüenza y el silencio durante 29 años, y cuando concertó la cita para el sacramento de la reconciliación y se dirigió a ver al sacerdote, oyó un susurro que le decía: “No tienes que hacerlo”, y “Esto es demasiado difícil… vuelve atrás”.
Rezando Avemarías todo el camino, llegó a la confesión llorando; y después de escucharla, el sacerdote hizo el gesto de levantar sobre sus hombros una oveja y dijo: “Todo el cielo se alegra… Bienvenida a casa”.
La hermana Bethany Madonna contó que, cuando la mujer comulgó al día siguiente, ella dijo que “mi vida será un ‘sí’ a Dios”.
La noche de avivamiento de apertura del Congreso Eucarístico Nacional ya ha tenido un profundo efecto en los participantes que hablaron con OSV News.
Belén Muñoz, de 18 años, de Rosa Park, Nueva Jersey, dijo que era “alentador” ver a tantos católicos reunidos para el congreso.
“Al crecer en una comunidad secular, es una experiencia totalmente diferente”, dijo. “Tener sólo una muestra de lo que nos estamos encontrando aquí es asombroso, y espero con ansias lo que vendrá el resto de la semana”.
“Esta noche me he dado cuenta de que Jesús está tan vivo en la Eucaristía y que es tan obvio que actúa a través de tanta gente”, dijo Molly Quinn, de 18 años, de Naperville, Illinois. Añadió que la experiencia “me hizo darme cuenta de que no estamos solos en este mundo y de que hay tanta gente que busca a Cristo como yo”.
“He pasado por una mala racha en mi vida, así que venir aquí y ver cómo Dios puede obrar a través de todos es realmente inspirador y poderoso, y me hace sentir renovada personalmente”, añadió Michelle Jurec, de 18 años, también de Naperville.
Claire Reardon, que venía con un grupo de su parroquia en la Arquidiócesis de Miami, dijo que era especial empezar el congreso con la oración ante Jesús Sacramentado, porque pone todo bajo el prisma del “componente central de nuestra fe”.
“Fue muy hermoso cómo los oradores se centraron en la singularidad e irremplazabilidad de todos los presentes y de todas las personas del mundo. Y el cuidado de la Iglesia por los más vulnerables y por compartir a Jesús en el Santísimo Sacramento con todos los que lo necesitan”, añadió.
Ese mismo día, mientras esperaba en la cola de inscripción, Maria Smith, quien trabaja con jóvenes en una parroquia de la Arquidiócesis de Indianápolis, dijo que estaba contenta de venir aquí por sí misma, ya que ella suele venir a estos eventos para apoyar a los jóvenes. Esta vez, vino para “poder profundizar en mi propia comprensión de la fe”, reflexionar en cómo la Eucaristía la puede transformar “en lo que estoy llamada a ser para la Iglesia de Dios”.
Cerca del final de la noche apertura, Lotty Cantrelle, de 63 años, enfermera de Lockport, Louisiana, se puso de pie y cantó una canción de alabanza y adoración casi al final de la velada. Dijo que su párroco “la ‘voluntarió'” para que viniera al congreso, pero después de vivir la sesión de avivamiento en esta noche de apertura, “sé que mi sacerdote sabía que yo necesitaba esto”, dijo.
“El corazón de una persona tendría que ser de piedra para no cambiar”, dijo, y recordó las palabras de la hermana Bethany Madonna sobre tener confianza en Jesús.
“Eso me reconfortó mucho”, dijo. “Creo que este es un viaje hacia mi sanación y para volver a ser yo misma, que solía ser más alegre. Así que estoy preparada”.
(Gretchen R. Crowe, directora de OSV News; Peter Jesser Smith, editor de noticias nacionales; Maria Wiering, redactora sénior; Lauretta Brown, editora de cultura; y María-Pía Negro Chin, editora de español, han contribuido a este reportaje.)