Ley, tecnología y caridad

Por Berta Mexidor
RIDGELAND – El padre Odel Medina, sacerdote de St. Anne-Carthage y St. Therese-Kosciusko expresó las preocupaciones, frustraciones y esperanzas de su comunidad y del resto de los católicos de la diócesis, preocupados por las familias afectadas después de las redadas de inmigración, durante una audiencia pública celebrada por el congresista estadounidense Bennie Thompson, presidente demócrata del Comité de Seguridad Nacional, el jueves 7 en Tougaloo College, tres meses después de las redadas que arrestaron a 680 inmigrantes y que impactaron directamente a tres parroquias de la diócesis y siete comunidades en el estado.
El representante Thompson estuvo acompañado de la representante Sheila Jackson Lee, de Texas, el representante Al Green, Texas y Steve Cohen, Tennessee, todos demócratas y también miembros de su comité, para pedir cuentas a la Oficina de Investigación del Departamento de Seguridad Nacional de Nueva Orleans, representada por el agente especial Jere Miles.
Miles defendió a su agencia diciendo que cumplieron con la ley y como resultado de la redada se han encontrado 400 casos de uso ilegal del número de seguro social (SSN, por sus siglas en inglés) para robo de identidad. Al padre Odel se unieron seis líderes comunitarios, públicos, policiales y de organizaciones que tuvieron la oportunidad de expresar sus testimonios, dentro de los que estaba Lorena Quiroz Lewis, organizadora de Working Together Mississippi.

Durante la audiencia, Monserrat Ramírez y Roberto Tijerina, miembros de Southerners on New Ground (SONG) mostraron una habilidad tecnológica para ayudar a los hispanos a comprender la audiencia. Transmitieron la audiencia en la página de Facebook de Mississippi Resiste, y para aquellos que no pueden hablar inglés, hubo un número de teléfono al que podían llamar y recibir la traducción al momento.
Decenas de personas portaron carteles con mensajes como” Dejennos trabajar”, “Vinimos a Trabajar, Progresar y Amar” y “A más redadas, mas familias separadas.”

Guíanos “Amable Luz”

Obispo Joseph R. Kopacz

Por Obispo Joseph Kopacz
A medida que profundizamos en el mes de Todos los Santos y Todas las Almas en nuestra fe y tradición católicas, impulsadas por la muerte y resurrección de Jesucristo, podemos apreciar “la Nube de Testigos” que han pasado el umbral hacia la vida eterna. Estos fieles discípulos son de nuestras propias familias y de la familia de la Iglesia. En el caso de este último, no necesitamos ancestry.com para desenterrar la historia; Hay un amplio testimonio en los archivos de casi 2000 años. La canonización más reciente en Roma levantó a John Henry Newman a la comunidad de los de túnica blanca que se encuentran alrededor del trono de la majestad de Dios. A mitad de la vida, “Kindly Light” condujo al cardenal John Henry Newman al redil de la Iglesia Católica, lejos de sus raíces anglicanas. ¡Es una historia notable! Su mente brillante, corazón amoroso y hambre insaciable y sed de verdad ya no podían tolerar una vida vivida en sombras e ilusiones.
“El 9 de octubre de 1845, renunció a su seguridad de por vida como profesor anglicano en Oxford y se convirtió en católico, uniéndose a las filas de los perdedores despreciados en la sociedad británica, perseguido y sujeto a hostigamiento. A pesar de sus propios prejuicios anticatólicos, un estudio honesto de las Escrituras y los primeros escritores cristianos lo convenció de que la fe católica era verdadera. Perdiendo a la mayoría de sus amigos y su seguridad, se embarcó a la edad de 45 años en un futuro incierto. Newman pudo ver mucha corrupción e incompetencia en la Iglesia Católica. De hecho, fue rechazado por muchos en la Iglesia después de su conversión. Pero a pesar de todo esto, nunca se arrepintió de ser católico, una decisión que tomó no porque admiraba a los católicos, sino porque se dio cuenta de que la Iglesia Católica es verdadera. Dependemos de Jesucristo, y de la iglesia que él estableció, en la cual viene a nosotros en palabra y sacramento, y la fe que profesa que nos lleva a casa a la Jerusalén celestial.“ (Extractos de una charla del cardenal Thomas C. Collins, arzobispo de Toronto)
Se necesitaría un esfuerzo considerable y se pensaría sondear las profundidades del legado del cardenal Newman, pero en este mes de Todos los Santos y Fieles Difuntos, es notable reflexionar en sus propias palabras sobre su conversión y el sentido permanente de la eternidad en su vida diaria. Después de recuperarse de una grave enfermedad cerca de Roma, escribió el poema El pilar de la nube, una referencia a Exodus 13: 21-22 a la nube que guiaba a los israelitas en el desierto durante el día y el pilar de fuego que los guiaba ellos en la noche Esta obra maestra es el viaje de su alma.
A medida que la segunda mitad de su vida giraba frente a cambios terrenales tan dramáticos, la relación personal del Cardenal Newman con el Señor crucificado y resucitado continuó creciendo. Su lema como obispo era Cor ad cor loquitur, o Corazón le habla al corazón. De hecho, su oración diaria y su comunión con Dios profundizaron su sentido de inmortalidad, que es el corazón del mes de Todos los Santos y Almas.
“Bajo la bendición de Dios, llegamos a vislumbrar nuestra independencia del significado de las cosas temporales y nuestra inmortalidad. Y si sucede que las desgracias nos sobrevienen como lo hacen a menudo, entonces aún más se nos lleva a comprender la nada de este mundo; entonces aprendemos aún más a desconfiar de él, y estamos destetados del amor por él, hasta que por fin simplemente flota ante nuestros ojos como un velo ocioso, que, a pesar de sus muchos matices, no puede ocultar la visión de lo que hay detrás, y comenzamos gradualmente a percibir que hay dos seres en todo el universo, nuestra propia alma y el Dios que la creó … Estas son las grandes verdades que están envueltas incluso en la mente de un niño, y que la gracia de Dios puede desarrollarse allí a pesar de la influencia del mundo externo.“
El cardenal John Henry Newman nos inspira a ver más claramente que hay un costo para el discipulado en todas las épocas, pero la “Luz amable” revela la esencia de la verdad, el amor y la paz en esta vida, con la visión de la vida eterna detrás del velo.

Elsa Baughman Mensajera Católica

Elsa Baughman

Antes de ser conocido como Mississippi Católico, el periódico de habla hispana de la Diócesis de Jackson fue publicado como “El Mensajero Católico” por más de diez años.

Con la anuencia del obispo William Houck, la acción de varias personas que reconocieron la necesidad de comunicarse en español con una comunidad en crecimiento y un equipo dedicado a informar se creó una idea. Es así como el 10 de octubre de 1997 salió a la luz la primera edición de “El Mensajero Católico”, hace ya más de 22 años.

 Elsa Baughman comenzó a trabajar en 1996 en la diócesis para el periódico diocesano, llamado en ese entonces” Mississippi Today”.

Venezolana de nacimiento, graduada de Periodismo en la Universidad del Zulia en Venezuela, y con una maestría en Comunicación de Masas de la University of Southern Mississippi (USM),  madre y abuela, Elsa trajo al periódico su rica experiencia, su cultura y el deseo de romper con estereotipos.

Elsa recuerda que llegó a Mississippi en el año 1976, cuando eran pocos los hispanos en el estado. Después de graduarse, casarse y trabajar en varias empresas internacionales y ser maestra de español, comenzó a trabajar en Mississippi Catholic.

 En diciembre del año 1979 el Padre Mario Viscaíno, fundador del SEPI, celebró una misa para conmemorar el aniversario de la Virgen de Guadalupe en la Catedral de San Pedro, junto al Obispo Houck y desde allí se estableció la tradición de la Misa en español y la necesidad de atender a la comunidad Latina que cada vez crecía más.

Elsa dice, “…Para mi trabajar en el periódico fue un sueño hecho realidad. El haber conocido a tantas personas y sacerdotes, viajar por todo el estado y trabajar para tres obispos- William Houck, Joseph Latino y Joseph Kopacz- fueron experiencias maravillosas”.

“ … Una de mis mejores memorias y que guardo con mucho cariño fue la visita a la Misión de Saltillo en México, por invitación del Obispo Kopacz, después de haber reportado por muchos años acerca de la importancia de esta misión en la diócesis,” concluye Elsa.

Al principio el Mensajero Católico de Mississippi solo se publicaban cuatro ediciones al año. Con el aumento de la población hispana y las actividades en cada parroquia a las que asistían, el periódico paso a publicarse mensualmente, como hasta ahora.

“Mississippi Today” cambio su nombre el 3 de diciembre de 1999, a Mississippi Catholic como es conocido hoy. El nombre de “Mensajero Católico” cambió también, a “Mississippi Católico” en junio del 2008.

Entre las muchas personas que contribuyeron a promover el periódico en español hay que mencionar a Janna Avalon, quien por más de 40 años dirigió “Mississippi Catholic,” Fabvienen Taylor, quien escribió el primer artículo acerca de las diferencias y similitudes de los Latinos, Elizabeth Ayala, quien escribió acerca de los sacramentos, la hermana Patricia Brown, que fundó y dirigió el Ministerio Hispano,  la hermana Day, Ligia Fenton,  Susan Falkner, y los sacerdotes Jerry Mattingly- Hazlehurst, Richard Smith- Forest, Anthony Quyet-Forest, quienes siempre apoyaron las celebraciones de los Hispanos y su divulgación en el periódico en español.

Como editora, reportera y católica comprometida, todo el mundo conoció a Elsa. Hoy todavía, después de su jubilación, Elsa sigue los aconteceres de su comunidad y aún se le ve tomando fotos en la Parroquia Santa Teresa en Jackson, donde continúa activa como parroquiana. Actualmente disfruta su tiempo libre con su esposo, Brian, sus hijas, Carla y Verónica y sus nietos, Arianna y Roman.

Arzobispo Gómez, primer Latino, presidente de USCCB

Por Dennis Sadowski
BALTIMORE (CNS) – El arzobispo José H. Gómez de Los Ángeles fue elegido para un mandato de tres años como presidente de la Conferencia de Obispos Católicos de los Estados Unidos (USCCB) durante la asamblea general de otoño de los obispos en Baltimore.
El nativo de México fue elegido el 12 de noviembre con 176 votos de una lista de 10 nominados.

Archbishop Jose H. Gomez of Los Angeles, right, speaks alongside an unidentified clergyman during a meeting in Rome with U.S. Encuentro representatives Sept. 13, 2019. Encuentro representatives were in Rome to present findings from the Fifth National Encuentro to Pope Francis and Vatican officials. (CNS photo/USCCB)

El arzobispo Gómez, de 67 años, es el primer latino en ser elegido presidente. Se ha desempeñado como vicepresidente de la conferencia durante los últimos tres años, trabajando junto al cardenal Daniel N. DiNardo de Galveston-Houston, el presidente saliente. Su mandato como presidente comienza cuando termina la asamblea.
El prelado de Los Ángeles ha sido uno de los principales defensores de los derechos de los inmigrantes, y a menudo ha expresado su apoyo a los recién llegados a medida que enfrentan las crecientes restricciones implementadas por el Departamento de Seguridad Nacional y otras agencias federales.

Ministerio Hispano se expande

Por la hermana Patricia Brown y Elsa Baughman
JACKSON – La primera celebración de la Virgen de Guadalupe en Jackson, hace exactamente 40 años, no fue sólo un éxito sino también la semilla que, con el tiempo, diera inicio a la creación del ministerio hispano de la Diócesis de Jackson.
En esa ocasión, un domingo 16 de diciembre de 1979, a las 4:30 p.m. el Obispo Joseph Brunini, el Obispo Auxiliar William Houck, el Padre Mario Viscaíno y el Padre Paul Madden celebraron la primera Misa en español en la Catedral de San Pedro.
Cerca de 200 hispanos del área de Jackson asistieron a esa celebración que prosiguió con una fiesta y una charla del Padre Viscaíno, el cual estaba de visita en Jackson para promover el establecimiento de un consejo pastoral hispano en Jackson. En su presentación el padre Vizcaino mencionó su deseo e inquietud en que se realizara una Misa en español continuamente en Jackson. El Padre Viscaíno era el director de la Oficina de Asuntos Hispanos del Instituto Pastoral del Sureste (SEPI) con sede en Miami, Florida.
En enero de 1980 se organizó en Jackson un consejo pastoral que se reunía regularmente y se continuó con la celebración de la Misa dominical en la Catedral de San Pedro en las tardes, cambiando el horario de tiempo en tiempo a petición de la feligresía. Se ofrecían además clases de religión, de inglés, se celebraban fiestas sociales y religiosas y se distribuía un boletín informativo que se enviaba a 95 familias.
Para ese entonces la comunidad hispana del área de Jackson era pequeña. El censo de los Estados Unidos en 1980 indicó que la población de hispanos en Mississippi era menos del uno por ciento. Muchos de estos eran trabajadores migrantes del campo dispersos en la zona del Delta y en procesadoras de pollo en el centro del estado.
Había una preocupación real por identificar a los hispanos residenciados e identificar sus necesidades. Un reporte de la Diócesis de Jackson en 1988 indicó que en Jackson se estaba realizando una misa en español regularmente en el Delta para el aniversario de la Virgen de Guadalupe.
Aunque la Hermana Thea Bowman, difunta, no hablaba español, ayudó a la comunidad hispana para que continuara sus actividades y celebrara la Eucaristía en español en el área de Jackson.
Durante los años de 1980, el Padre Michael Flannery y el Padre Richard Smith asistieron a los trabajadores migrantes que trabajaban cerca de Clarksdale con servicios religiosos y sociales.
El censo de 1990 contó 9,752 hispanos en los 65 condados de la diócesis. La diócesis de Jackson le solicito a la hermana Patricia Broderick que hiciera un estudio de la comunidad hispana y pusiera un plan para atender sus necesidades. Las sugerencias de esa propuesta, escrita en noviembre de 1990, permanecen validas actualmente, solo los números han aumentado y las necesidades se han multiplicado.
En 1991, el padre José Daniel López, originario de Cuba, fue ordenado sacerdote en la diócesis de Jackson y comenzó a celebrar la Misa del domingo en la Catedral de San Pedro. Su presencia motivó a los hispanos a asistir con más frecuencia a la Misa dominical. El diacono Roberto Jiménez comenzó a asistir al padre López en la celebración de la Liturgia en Jackson y el padre Anthony Quyet en la iglesia St. Michael en Forest celebró la primera Misa en español el 7 de abril de 1991, para los trabajadores de las plantas procesadoras de pollo en el condado de Scott. Antes de esta celebración litúrgica en Forest, el Padre Madden celebraba misa en español en la residencia de la familia Echiburú en Morton. En 1993, la hermana Jeroma Day comenzó a visitar hogares hispanos en Rosedale y a los hispanos en la penitenciaria en Parchman.
En septiembre de 1994 la Diócesis de Jackson estableció la Oficina del Ministerio Hispano bajo la dirección de la Hermana Patricia Brown.
La Hermana Patricia Godri llegó a Carthage, en septiembre de 1994 a la iglesia St. Anne, coordinó la Misa en español y clases de inglés. En 1995 los misioneros de la Orden Glenmary enviaron al Padre Francisco Pellissier para servir como ministro sacramental en seis condados del noreste de Mississippi y el 17 de diciembre celebró la primera misa bilingüe en la Misión San Christopher en Pontotoc.
La hermana Nancy Schreck, el Padre Jerry Peterson, Padre Steve Pawelk, y el Padre Gerry Richardson fueron uno de los primeros que sirvieron en la comunidad hispana en New Albany. Las Hermanas Patricia Sullivan, Rosemary Empen y Kris Vorenkamp estuvieron a cargo de los servicios pastorales, litúrgicos y sociales en los condados Chickasaw y Calhoun.

En 1996 se inauguró el Centro Católico en Morton. La primera misa en español en Ripley, Condado Tippah, se celebró el 12 de diciembre de 1997 en honor a la Virgen de Guadalupe.
El Padre Jerry Mattingly, pastor asociado de la Iglesia San Francisco de Asís en Madison, estuvo celebrando Misa en español en la Misión San Martín en Hazlehurst desde 1997.
Además de los ya mencionados, los sacerdotes y religiosas que han participado activamente en el ministerio hispano en Jackson desde su comienzo en 1979 incluyen en orden cronológico: Padre Robert Olivier, Hermana Marcela García, Padres Aedan Manning, Joseph Dyer, John Rietti, Patrick Noonan, Monseñor Noel Foley, Hermana Leah Couvillion, Padre Domingo Rodríguez, Hermana Magdalena McNemar, padres Daniel Gallagher y Patrick Farrell.
En 1999, el hermano Ted Daush asumió el liderazgo de la oficina del Ministerio Hispano hasta junio de este año, dando veinte años a este ministerio.
El establecimiento del ministerio Hispano en la Diócesis de Jackson permitió el aumento de servicios religiosos, sociales y culturales a la comunidad hispana en los 65 condados de la diocesis.
(Este artículo fue publicado en Mensajero Católico el 17 de diciembre de 1999. Elsa Baughman, actualizó el mismo para esta edición. Lea el artículo en su totalidad en Mississippicatholic.com/español)

(Debajo. En un artículo titulado”?Yo parezco Mexicano? de Fabvienen Taylor, se presentó la diversidad de la comunidad Latina. En esta foto de archivo de 1997 se ven las primeras caras de hispanos, en el primer número de “El Mensajero Católico.” (Foto por Fabvienen Taylor)

Guíanos “Amable Luz”

El pilar de la nube

“Guíame amable luz, entre las tinieblas que me rodean, ¡guíame! La noche es oscura y estoy lejos de casa, ¡guíame!
Cuida mis pasos; no pido ver la escena distante; un paso es suficiente para mí.
No fui siempre así, ni pedí que me guiaras; amaba elegir y ver mi camino; pero ahora ¡guíame!
Amaba el día brillante, y, a pesar de los miedos, el orgullo regía mi voluntad. ¡No recuerdes los años pasados!
Tu poder me bendijo tanto tiempo, ciertamente seguirá guiándome.
Entre páramos y pantanos, entre precipicios y correntadas, hasta que se vaya la noche, y con el alba sonreirán los rostros de los ángeles, los que yo amé hace mucho tiempo, ¡y perdí hace ya tanto!”
Obispo Joseph Kopacz

Por Obispo Joseph Kopacz
A medida que profundizamos en el mes de Todos los Santos y Todas las Almas en nuestra fe y tradición católicas, impulsadas por la muerte y resurrección de Jesucristo, podemos apreciar “la Nube de Testigos” que han pasado el umbral hacia la vida eterna. Estos fieles discípulos son de nuestras propias familias y de la familia de la Iglesia. En el caso de este último, no necesitamos ancestry.com para desenterrar la historia; Hay un amplio testimonio en los archivos de casi 2000 años. La canonización más reciente en Roma levantó a John Henry Newman a la comunidad de los de túnica blanca que se encuentran alrededor del trono de la majestad de Dios. A mitad de la vida, “Kindly Light” condujo al cardenal John Henry Newman al redil de la Iglesia Católica, lejos de sus raíces anglicanas. ¡Es una historia notable! Su mente brillante, corazón amoroso y hambre insaciable y sed de verdad ya no podían tolerar una vida vivida en sombras e ilusiones.
“El 9 de octubre de 1845, renunció a su seguridad de por vida como profesor anglicano en Oxford y se convirtió en católico, uniéndose a las filas de los perdedores despreciados en la sociedad británica, perseguido y sujeto a hostigamiento. A pesar de sus propios prejuicios anticatólicos, un estudio honesto de las Escrituras y los primeros escritores cristianos lo convenció de que la fe católica era verdadera. Perdiendo a la mayoría de sus amigos y su seguridad, se embarcó a la edad de 45 años en un futuro incierto. Newman pudo ver mucha corrupción e incompetencia en la Iglesia Católica. De hecho, fue rechazado por muchos en la Iglesia después de su conversión. Pero a pesar de todo esto, nunca se arrepintió de ser católico, una decisión que tomó no porque admiraba a los católicos, sino porque se dio cuenta de que la Iglesia Católica es verdadera. Dependemos de Jesucristo, y de la iglesia que él estableció, en la cual viene a nosotros en palabra y sacramento, y la fe que profesa que nos lleva a casa a la Jerusalén celestial.“ (Extractos de una charla del cardenal Thomas C. Collins, arzobispo de Toronto)
Se necesitaría un esfuerzo considerable y se pensaría sondear las profundidades del legado del cardenal Newman, pero en este mes de Todos los Santos y Fieles Difuntos, es notable reflexionar en sus propias palabras sobre su conversión y el sentido permanente de la eternidad en su vida diaria. Después de recuperarse de una grave enfermedad cerca de Roma, escribió el poema El pilar de la nube, una referencia a Exodus 13: 21-22 a la nube que guiaba a los israelitas en el desierto durante el día y el pilar de fuego que los guiaba ellos en la noche Esta obra maestra es el viaje de su alma.

CIUDAD DEL VATICANO – Melissa Villalobos de Chicago enciende una vela durante una vigilia antes de la canonización de San Juan Enrique Newman, en la Basílica de Santa María la Mayor en Roma el 12 de octubre de 2019. La curación de Villalobos, a través de la intercesión de San John Henry Newman fue aceptada como el milagro necesario para la canonización del cardenal británico. (Foto del CNS/Paul Haring)

A medida que la segunda mitad de su vida giraba frente a cambios terrenales tan dramáticos, la relación personal del Cardenal Newman con el Señor crucificado y resucitado continuó creciendo. Su lema como obispo era Cor ad cor loquitur, o Corazón le habla al corazón. De hecho, su oración diaria y su comunión con Dios profundizaron su sentido de inmortalidad, que es el corazón del mes de Todos los Santos y Almas.
“Bajo la bendición de Dios, llegamos a vislumbrar nuestra independencia del significado de las cosas temporales y nuestra inmortalidad. Y si sucede que las desgracias nos sobrevienen como lo hacen a menudo, entonces aún más se nos lleva a comprender la nada de este mundo; entonces aprendemos aún más a desconfiar de él, y estamos destetados del amor por él, hasta que por fin simplemente flota ante nuestros ojos como un velo ocioso, que, a pesar de sus muchos matices, no puede ocultar la visión de lo que hay detrás, y comenzamos gradualmente a percibir que hay dos seres en todo el universo, nuestra propia alma y el Dios que la creó … Estas son las grandes verdades que están envueltas incluso en la mente de un niño, y que la gracia de Dios puede desarrollarse allí a pesar de la influencia del mundo externo.“
El cardenal John Henry Newman nos inspira a ver más claramente que hay un costo para el discipulado en todas las épocas, pero la “Luz amable” revela la esencia de la verdad, el amor y la paz en esta vida, con la visión de la vida eterna detrás del velo.

Nueva cara para los jóvenes de la Diócesis

MOBILE – En uno de sus primeros compromisos Daisey Martínez lee durante la Misa, que reunió además a ocho jóvenes de la diócesis de Jackson, durante el V Encuentro provincial en Mobile, el sábado 12 de octubre. (Foto por Berta Mexidor)

Por Joanna Puddister King
JACKSON – Daisey Martínez se unió al personal de la cancillería como Asociada del Ministerio de Jóvenes y Jóvenes Adultos para la nueva Oficina del Ministerio Intercultural el lunes 30 de septiembre. Martínez es miembro de St. Jude Pearl, pero también es catequista en St Martin Hazlehurst y co-líder del grupo de jóvenes adultos en St. Richard Jackson. Martínez es graduada de la Universidad de Mississippi y ha trabajado como consejero de admisiones para la universidad.
Durante el verano, dos eventos ayudaron a Daisey a postularse para el puesto en la diócesis: tuvo una experiencia hermosa e íntima con la Eucaristía en el Instituto de Liderazgo de Verano para Jóvenes Latinos del Instituto Pastoral del Sudeste (SEPI) a fines de julio y luego la crisis creada, por las redadas de ICE en Mississippi, el 7 de agosto.
Fran Lavelle, Directora de Formación de Fe está encantada de tener a Martínez a bordo.
“Daisey trae tantos regalos a este ministerio. Ella es una líder. Ella está profundamente comprometida con su fe y con el servicio al pueblo de Dios. Estoy muy emocionada de ver cómo Dios usa sus dones al servicio de los jóvenes de nuestra diócesis,” dijo Lavelle.
Hija de inmigrantes, su madre María de El Salvador y su padre Pablo de México, Daisey le da crédito a su madre por la profunda fe que tiene hoy. “Ella me presentó a Dios, su amor y mucho más,” dijo Martínez.

Tome nota

Vírgenes y Santos. Celebraciones:

Día de Todos los Santos. Viernes 1ro noviembre:
Día de los Fieles Difuntos. Sábado 2 de noviembre
Virgen de los Treinta y Tres. Patrona de Uruguay.
Viernes 8 de noviembre.
Señora del Rosario de Chiquinquirá. Patrona de Colombia.
Lunes 18 de noviembre.
Señora de la Divina Providencia. Patrona de Puerto Rico. Martes 19 de noviembre:
Nuestra Señora del Quinche. Patrona de Ecuador. Jueves 21 de noviembre.
Santa Cecilia y Nuestra Señora de la Paz del Salvador. Viernes 22 de noviembre.
Día de Acción de Gracias. Jueves 28 de noviembre.

Convocatoria
Conferencia Juvenil Diocesana. “ Tierra Sagrada” con la conferencista Rita West. Febrero 14-16, 2020 en el Vicksburg Convention Center, patrocinado por la oficina del Ministerio Juvenil de la Diócesis. Para registrarse, por favor comunicarse con su parroquia.

Ambiente Seguro
Para reportar un abuso: Licenciada Valerie McClellan, trabajadora social.
Por favor, contáctela al 601-326-372

Feligreses de Santa Teresa honran a su patrona de gran fe

Por Berta Mexidor y Elsa Baughman
KOSCIUSKO/JACKSON – Las parroquias de todas partes celebran Santa Teresa de Lisieux, conocida como “La Pequeña Flor,” alrededor del 1ro de octubre de cada año, el día oficial de la fiesta marcado en el calendario de la Iglesia.
El obispo Joseph Kopacz reconoció y rindió homenaje a la Pequeña Flor durante la celebración de la Misa en Santa Teresa en Kosciusko el 29 de septiembre. El Obispo Kopacz concelebró la Misa con el Siervo Misionero de la Santísima Trinidad Padre Odel Medina, ST pastor.
El obispo Kopacz explicó que Santa Teresa es un modelo de fe y amor en Cristo y conocida por su espiritualidad de hacer lo ordinario con un amor extraordinario. Hoy, es venerada en todo el mundo y asume el título de co-patrona de las misiones, “por sus oraciones y su manera de llegar a otros,” dijo el obispo Kopacz.

JACKSON – Niños representantes de la comunidad depositaron 24 rosas en el altar, por el amor de la Santa por las rosas. En la foto, una de las niñas latinas deja su rosa con devoción. (Foto por Elsa Baughman)

Los feligreses de Santa Teresa en Jackson celebraron a su patrona el 6 de octubre durante una misa bilingüe especial fuera de los terrenos de la parroquia y en el Campamento Garaywa en Clinton.
El padre Juan Chavajay, pastor de Santa Teresa, fue el celebrante principal de la misa celebrada en el auditorio.
La homilía del padre Chavajay se centró en la corta vida de Santa Teresita del Niño Jesús, ”Hoy le pedimos su intercesión para que podamos tener la fe que ella tenía,” dijo el padre Chavajay. “Es fácil confiar en Dios cuando las cosas van bien, pero cuando llegan los problemas, cuestionamos nuestra fe,” dijo.
Santa Teresa es conocida además como Santa Teresita del Niño Jesús. En sus cortos años de existencia, experimentó la felicidad de una niña amorosa, la tristeza después del fallecimiento de su madre, solo a los cuatro años, y el amor y la atención recibidos por sus hermanas y su padre, de quienes aprendió las oraciones y caridad inclinandola a la búsqueda de la santidad.
Como parte de las celebraciones organizadas en ambas parroquias, rosas rojas, amarillas y blancas adornaban la imagen de Santa Teresa, el altar y la iglesia y se celebraron actividades para los niños, que incluyeron piñatas y juegos.